Director Área Business Management Sistel

Todo aquel que inicia o está inmerso en la construcción de una página web, tienda online, gestión de redes sociales o similares lo hace con la intención de obtener algo a cambio: vender más, conseguir clientes potenciales, lograr reconocimiento de marca, etc. Partiendo de este supuesto, si pudiéramos saber a priori si vamos a conseguir lo que queremos o no está claro que nos ahorraríamos algunos cuantos esfuerzos. No es el caso, pero desde nuestra experiencia sabemos que hay cosas que nos acercan al éxito o al menos, hacen que el camino hacia él sea mucho más corto.

Que nuestro proyecto en internet tenga éxito o no depende de muchos factores y, por supuesto, de cuáles sean nuestros objetivos. Lo habitual es pensar en una tienda online, por tanto el éxito lo relacionamos con las ventas que esta obtendrá. Pero existen muchos tipos de proyectos y formas distintas de medir su éxito: la obtención de referencias en el caso de páginas web corporativas, el uso de los enlaces o consumos de información en el caso de portales institucionales, las descargas de documentación en el caso de las webs de divulgación, los seguidores en el caso de los bloggers, son solo algunos ejemplos.

Por tanto, debemos tener claro cuál es el objetivo, medir qué tan cerca o lejos estamos de él y tomar medidas para alcanzarlo; este es el primer paso. En la actualidad, la analítica web ha avanzado muchísimo, por lo que saber en qué punto estamos con respecto al objetivo trazado es muy sencillo.

El segundo paso es tener en cuenta los factores que afectan a nuestro objetivo, el llamado ecosistema web que nos posicionará, es decir, todas las herramientas que nos ayudan a dar visibilidad a esa tienda online o página web, consiguiendo notoriedad en un inmenso mar de direcciones ‘url’ que cada día crece sin control.

Posicionar no es sencillo, porque se trata de explicar la calidad de un producto en línea con su precio, o un precio competitivo en un segmento, un valor diferencial concreto, un servicio pre y posventa impecable o un conocimiento del mercado al que nos dirigimos. Quien crea que esto es fácil, deja de lado cosas importantes, no se trata de crear una página donde expliques un producto o servicio, se trata de que esa explicación consiga ventas, divulgación, suscriptores, etc.

Para lograr ese posicionamiento os recomendamos la creación de un plan de marketing online, que recoja un análisis del estado del mercado online en el sector en el que nos movemos, que incluya un análisis de lo que está haciendo la competencia, un Dafo de nuestro producto/servicio, una definición clara de objetivos (medibles, por supuesto) y un plan de acción que contemple:
Contenidos: Qué tipo de contenidos necesita mi audiencia objetivo y cómo vamos a generarlos, de qué han de tratar nuestros artículos, qué pretendemos comunicar en ellos y cómo los vamos a difundir (blog, web corporativa, fichas de artículos, landing pages).
Obtención de contactos: Qué vamos a hacer para obtener los correos electrónicos y los datos de las personas que están potencialmente interesadas en nuestros productos o servicios. Campañas en Facebook adds, concursos, foros, ferias, tarjetas de fidelización, etc.
Posicionamiento Orgánico (SEO): Trabajar nuestros contenidos desde el punto de vista del posicionamiento en buscadores, estudiar palabras clave, nuestra posición y nuestra evolución, optimizar nuestras url, seguir las recomendaciones de Google.

Google Adwords (SEM): Google ofrece herramientas para crear y optimizar campañas de anuncios de pago. Si hacemos un buen trabajo en esta área conseguiremos mucho más tráfico cualificado por el mismo dinero. Si no ponemos atención a esto podemos obtener visitas a las que no interesan nuestros productos, clicks muy caros que vacían nuestro presupuesto diario y provocan que nuestro anuncio no se muestre (o coladeros de euros similares).

Comunidades: Decidir cuál o cuáles van a ser nuestras redes sociales de referencia y qué pretendemos de cada una de ellas. Definir cosas como el tono de nuestras comunicaciones, la asiduidad, el plan de contingencia en caso de comentarios negativos, etc.

Fidelización: En esta área yo determinaría cómo y cuándo vamos a realizar las campañas de newsletters, qué tipo de contenido vamos a difundir, dónde vamos a almacenar los datos que obtengamos de los suscriptores a fin de posteriormente realizar segmentaciones para nuevos envíos.

Analítica: Los objetivos definidos en el plan de marketing online deben ser contrastados y para ello debemos de establecer métricas y comprobarlas conforme vamos avanzando en el tiempo. Medir el retorno de cada una de nuestras acciones y de nuestro negocio online independientemente del tipo es imprescindible.

Y mucho más: Además de lo que enumero arriba tenemos multitud de herramientas adicionales que nos acercarán poco a poco al éxito y que dependerán del tipo de proyecto a abordar: bloggers, shopping, Maps, Youtube, remarketing, afiliados, referenciadores.

En resumen, tener éxito dependerá del objetivo y de lo que hagas para llegar a él a través del posicionamiento en internet; por esto ninguna tienda online funciona activándola sin más, ninguna web genera referencias sin añadir algún blog o newsletter y ninguna red social consigue seguidores sin crear contenido interesante.