«Mientras que el Índice de Producción Industrial (IPI) habla de un crecimiento acumulado hasta mayo del 11,6%, la realidad del sector cerámico es que estamos cayendo aproximadamente un 2,3% hasta junio. Lo que significa que hay casi 14 puntos de diferencia» corrobora Alberto Echavarría, secretario general de la Asociación Española de Fabricantes de Azulejos y Pavimentos Cerámicos (Ascer).
En esta línea, aclara Echevarría que venían constatando «diferencias notables entre las estadísticas y la percepción de las propias empresas del sector». Para solucionar este problema, la patronal del sector cerámico tomó la decisión de llevar a cabo una encuesta interna entre los asociados y «ahora mismo, con más del 80% de la producción sectorial, arroja unos datos muy distintos a los que indica el Índice de Producción Industrial (IPI)», constata.
En concreto, y según se extrae de los datos recabados mediante un sondeo entre empresas fabricantes de baldosas cerámicas asociadas a Ascer, con una representatividad del 80,8% de la producción sectorial de 2023, la producción durante el primer semestre de 2024 registra una caída del 2,3% comparada con el mismo periodo del año 2023 (enero-junio).
Diferencias de 9,6 puntos
Por ello, desde Ascer apuntan que «el dato de evolución que arroja la encuesta interna dista de la tendencia que apuntan los datos del IPI publicados por el Instituto Valenciano de Estadística (IVE), que informan de un crecimiento del 11,6% de enero a mayo de 2024″.
En concreto, a principios de año, el Instituto Valenciano de Estadística informó a Ascer, tal y como ellos mismos han informado de que, «siguiendo lo marcado por la regulación europea, se había cambiado el año base para el cálculo del índice».
Explican desde Ascer también que hasta ahora el IPI se publicaba en base año 2015 y, desde enero de 2024, el año base pasa a ser 2021, actualizando también el histórico.
Ante esta situación, informan las informan las mismas fuentes, «hemos ido haciendo un seguimiento y, ante la divergencia con los datos oficiales, se ha elaborado un sondeo de producción semestral a las empresas asociadas para poder tener una cifra de la evolución de la actividad de las empresas del sector cerámico».
Para solucionar esta cuestión, en próximas fechas, la patronal del sector cerámico mantendrá un encuentro con el Instituto Valenciano de Estadística, para tratar de entender a qué se puede deber esta diferencia de resultados. «Mientras tanto, inciden desde Ascer, que aunque los datos de producción no muestran caídas tan significativas como en 2023, todavía no se puede hablar de recuperación generalizada».
Prematuro hablar de recuperación
En este sentido, el presidente de Ascer, Vicente Nomdedeu ya señaló en otro foro que «es prematuro hablar de una recuperación». «El sector sigue inmerso en la crisis de demanda en los mercados debido a los vaivenes de los últimos años», ha explicado .
A su juicio, «el sector ha perdido competitividad frente a otros productores europeos por cuestiones como la crisis energética y la falta de ayudas por parte del Estado para la industria española«. El representante del sector cerámico también consideró que esta situación «ha abierto más si cabe la brecha frente a productores extracomunitarios menos afectados por las oscilaciones de la energía y con regulaciones mucho más laxas».
Nomdedeu advirtió también que “si no somos capaces de garantizar que los mercados europeos sean igual de exigentes para los fabricantes extracomunitarios que para los comunitarios, en el medio plazo muchos de los fabricantes europeos se convertirán en extracomunitarios forzados a una deslocalización a mercados cercanos con menores exigencias regulatorias o medioambientales». «Este proceso, -incidió- tendrá como primera consecuencia el empobrecimiento de toda una región que verá cómo desaparece no solo la actividad industrial cerámica de la provincia, si no la destrucción de todo el entramado económico y social que depende directa o indirectamente de nuestro sector”.
Por otra parte, un informe elaborado por Ascer, elaborado a través de encuestas internas a los socios, revela que la factura energética para el sector español fabricante de baldosas cerámicas en 2023 ascendió 1.031 millones de euros para una producción de 394 millones de m2 (-21,2%), la factura sigue siendo más del doble de lo que se pagaba antes de la covid-19 (104% más vs 2019).
Las exportaciones caen hasta abril un 5%
En cuanto a la demanda, las ventas en 2023 disminuyeron un 14,3% en valor y un 19,7% en volumen. Según las últimas estadísticas oficiales, las exportaciones hasta el mes de abril todavía muestran un signo negativo con una caída acumulada del 5% respecto al mismo periodo de 2023.
El empleo es el único indicador que revela cierto cambio de tendencia y entre enero y mayo se han creado 551 empleos nuevos.