En pocas ocasiones como en los Premios Jaume I la ciencia se homenajea con tanta pompa y atención. En un escenario privilegiado, la Lonja de la Seda de Valencia, y con la presencia de Sus Majestades los Reyes, los 6 premiados de este año han recibido sus galardones.
El acto ha comenzado con la llegada de las autoridades, a las que ha precedido la entrada en el edificio de los premiados Jesús Sanz, Marta Reynal, Antonio de Lacy, Emilio Chuvieco, Montserrat Calleja y Ángela Pérez. Posteriormente, se ha rendido un minuto de silencio en homenaje a la figura y el legado del profesor, y padre de los premios, Santiago Grisolía. Los premios de este año serán los primeros tras el fallecimiento este verano del profesor.
El primero en intervenir ha sido Roger Kornberg, Premio Nobel de Química, quien ha querido recordar la memoria de Grisolía ligándola a la del también Nobel español Severo Ochoa. «La lección del siglo pasado es clara: para resolver un gran problema, no trates de hacerlo directamente. Persigue una curiosidad sobre la Naturaleza y se encontrará la solución. Haz investigación básica», ha expresado.
Unir ciencia y empresa
Otra de las personalidades en dirigir unas palabras ha sido Vicente Boluda, presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) y vicepresidente de la Fundación Premios Rei Jaume I. El empresario ha querido sumarse al homenaje al fallecido científico valenciano.
«El profesor consiguió trabajar por la ciencia, la investigación y el emprendimiento, haciendo lo que mejor se le daba: unir y actuar. Unió a dos colectivos que parecían abocados a la no-comunicación, como son la investigación y la empresa. Dos colectivos que parecían agua y aceite, pero que él, con su empeño, consiguió “mezclar”. Y en eso, como en muchas otras cosas, fue pionero, fue el primero que lo consiguió», ha afirmado.
Boluda ha puesto además hincapié en la necesidad de «apostar por la investigación sin ambages ni complejos». Para ello, afirma, «deben aumentarse los recursos para la misma, buscando mecanismos que incentiven la participación del sector privado, como hacen los países y territorios líderes del mundo en investigación e innovación».
Homenaje a los premiados
Los premiados han querido aprovechar al altavoz que suponen los premios para poner en valor el papel que la ciencia ocupa en la sociedad. A través de las palabras del representantes, y también premiado a la Investigación Médica, el cirujano Antonio de Lacy ha recordado la necesidad de fomentar una sociedad saludable.
El cirujano ha hecho suyas las palabras en pro de la colaboración público privad al decir que «el país necesita un impulso importante en dos aspectos: educación y sanidad. Todos deben poder acceder a esto. Es muy importante la unión de lo público y lo privado. Para la gente que nos dedicamos a la investigación, es algo fundamental».
«Debemos poner la salud en el centro. La salud es salud medioambiental y también económica. Supone trabajar para acabar con las desigualdades sociales», ha sentenciado de Lacy.
Valencia, una tierra para invertir
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha comenzado su discurso haciendo notar el «inmenso vacío que hay en esta lonja», en referencia a la ausencia de Grisolía. Puig ha querido recordar la «alianza histórica a cuatro bandas» que ha caracterizado a los valencianos: el autogobierno, el emprendimiento privado, el conocimiento científico y nuestro adn, siempre abierto al mundo.
«¿Acaso alguien ha construido algo bueno y duradero estando dividido? ¿Sirve de algo el estado de confrontación permanente? Es obvio que no», ha declarado Puig.
Por último, ha sido el Rey don Felipe el encargado de clausurar el acto con un discurso que arrancaba loando Valencia como una tierra de «genios, innovadores y emprendedores». Su Majestad ha expresado la «relevancia de la ciencia para dar respuesta a los grandes retos globales contemporáneos».
«Hoy sigue siendo prioritario atraer y retener talento científico e innovador, pues será esencial para que nuestro país sea más competitivo internacionalmente y con mayor autonomía estratégica», ha concluido.