La nueva «doctrina económica» de Bruselas para competir con China y EE.UU.
La Comisión Europea ha presentado este miércoles la «Brújula de la Competitividad», una estrategia económica con la que Bruselas busca recuperar su competitividad y ser capaz de competir con potencias como Estados Unidos o China. Desde el Ejecutivo comunitario han explicado que esta nueva «doctrina económica» pretende convertir Europa en el lugar «donde se inventan, fabrican y comercializan las tecnologías, los servicios y los productos limpios del futuro, a la vez que es el primer continente en alcanzar la neutralidad climática».
En la presentación del documento en Bruselas, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha asegurado que «Europa tiene todo lo que necesita para triunfar en la carrera hacia la cima». No obstante, ha considerado que se han de corregir las «debilidades para recuperar la competitividad».
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Según ha explicado la jefa del Ejecutivo comunitario, la «Brújula de la Competitividad» transforma «las excelentes recomendaciones» del informe Draghi en una hoja de ruta. «Así que ahora tenemos un plan. Tenemos la voluntad política. Lo que importa es la rapidez y la unidad. El mundo no nos está esperando. Todos los Estados miembros están de acuerdo en esto. Así que, transformemos este consenso en acción», ha defendido.
Una nueva «doctrina económica»
Por su parte, el vicepresidente ejecutivo de Prosperidad y Estrategia Industrial, Stéphane Séjourné, ha indicado que la «Brújula de la Competitividad» será «doctrina económica» de la Comisión para los próximos cinco años. «Esta doctrina es sencilla y se puede resumir en una palabra clave: competitividad. Competitividad en cada euro que gastemos y en cada iniciativa que propongamos», ha apuntado.
Séjourné ha destacado que de esta ambición se desprende «un triple programa de trabajo: simplificar, invertir y acelerar». «La Brújula debe suponer un cambio de mentalidad para Europa y los europeos. Hacer que Europa sea más previsible, manteniendo al mismo tiempo el rumbo de nuestro modelo europeo: descarbonizado, social y respetuoso con nuestros valores», ha remarcado.
Innovación, descarbonización y seguridad
Teniendo en cuenta las recomendaciones del informe Draghi, presentado el pasado mes de septiembre, esta estrategia dibuja tres áreas de acción: innovación, descarbonización y seguridad.
En primer lugar, la «Brújula de la Competitividad» busca cerrar la brecha de innovación. La Comisión pretende crear «un hábitat» para las nuevas empresas innovadoras y promover el liderazgo industrial en sectores de alto crecimiento basados en tecnología. En este sentido, la Comisión propondrá las iniciativas ‘Gigafactorías de IA’ para impulsar el desarrollo y la adopción industrial de la Inteligencia Artificial en sectores clave.
En el ámbito de la innovación, el Ejecutivo europeo también presentará planes de acción para materiales avanzados, cuántica, biotecnología, robótica y tecnologías espaciales. Además, lanzará una estrategia específica para abordar los obstáculos que impiden que surjan nuevas empresas y crezcan.
En segundo lugar, la estrategia establece una hoja de ruta conjunta para la descarbonización y la competitividad. Uno de los principales puntos busca facilitar el acceso a una energía «limpia y asequible» ante los altos precios de la misma.
El principal vector será el Pacto para una Industria Limpia, para promover la descarbonización, la tecnología limpia y los modelos circulares. También se pondrá en marcha el Plan de Acción para la Energía Asequible y una Ley de Aceleración para facilitar permisos para la transición industrial. Además, se desarrollarán planes específicos para sectores intensivos en energía como acero, metales y químicos.
La tercera área de acción pretende reducir las dependencias «excesivas» de Europa y aumentar la seguridad. Para contrarrestar este fenómeno, Bruselas propone introducir una «preferencia europea» en las licitaciones públicas de «sectores y tecnologías críticos» para aprovechar el potencial de los fondos públicos, así como crear un nuevo tipo de Asociaciones de Comercio e Inversiones con terceros países enfocadas en asegurar el suministro de materias primas, energías y tecnologías limpias, mientras que la UE aumentaría sus inversiones sostenibles en los socios.
Cinco «facilitadores horizontales» para la competitividad
Estos tres pilares se complementan con cinco «facilitadores horizontales» diseñados para fortalecer la competitividad en todos los sectores.
El primero es la simplificación, cuyo objetivo es reducir la carga regulatoria y administrativa. En segundo lugar, se busca eliminar barreras en el mercado único para optimizar su funcionamiento en todas las industrias.
El tercer facilitador es la financiación de la competitividad, dada la falta de un mercado de capitales eficiente que transforme el ahorro en inversión. Para ello, la Comisión presentará la Unión Europea de Ahorro e Inversión, que impulsará nuevos productos financieros, fomentará el capital de riesgo y asegurará un flujo de inversiones fluido en toda la UE.
Además, se promoverá el empleo «de calidad», para garantizar así una mejor alineación entre las habilidades de los trabajadores y las demandas del mercado laboral.
Por último, se coordinarán las políticas a nivel nacional y europeo. Para ello, la Comisión lanzará una herramienta de coordinación de la competitividad, que trabajará con los Estados miembros para asegurar la implementación de los objetivos políticos compartidos de la UE.