Esta semana arrancaba con el inesperado anuncio de que el Banco Popular de China (BPC, central) rebajaba diez puntos básicos a su tipo de interés de referencia, denominada LPR a un año, que pasaba del 3,45 %, nivel en el que se había mantenido desde agosto del año pasado, al 3,35 %. Los expertos enmarcaron esta decisión en un intento del Pekín de estimular su economía, tras un trimestre más débil de lo anticipado.
La decisión tomaba por sorpresa a los inversores y hacía subir las bolsas a comienzo de semana, ya que el pronóstico más extendido era el que apuntaba a que el banco central mantendría intactos sus tipos de referencia en la actualización de este mes.
En línea con el golpe de timón a los tipos, Pekín anunciaba este jueves una rebaja de 20 puntos básicos, desde el 2,5 % al 2,3 %, a una de sus principales herramientas para financiar a los bancos comerciales, los denominados servicios de préstamos a medio plazo (MLF, por sus siglas en inglés).
El BPC busca contener la demanda
El banco central chino indicó que llevaría a cabo una operación vía MLF de 200.000 millones de yuanes (27.548 millones de dólares, 25.410 millones de euros) a un año con una tasa del 2,3 %, mientras que la anterior, efectuada hace diez días, se había cerrado en el 2,5 %.
Los MLF son una herramienta creada en 2014 para financiar a los bancos comerciales y orientar los tipos de interés de referencia. Cuando se rebajan, significa que se reduce el costo del dinero que se presta a los bancos.
Esta misma semana el BPC anunció que rebajaría el aval que exige a los bancos e instituciones financieras para participar de este sistema, permitiéndoles solicitar una reducción gradual o una exención al vender bonos a medio o largo plazo.
Esta medida, según analistas, buscaba contener la reciente demanda de títulos gubernamentales, la cual ha mandado las rentabilidades a mínimos históricos.
Una rebaja «atípica»
Los expertos anticipaban que el BPC recortaría las tasas de los MLF, aunque esperaban que lo hiciera el 15 de agosto, siguiendo el calendario habitual. Para los analistas, la rebaja es «atípica» también porque es la primera vez desde abril de 2020 -en pleno impacto de la covid- que el banco central las reduce en más de 10 puntos básicos.
También el lunes, el banco central rebajó en 10 puntos básicos (del 1,8 % al 1,7 %) las tasas que aplica a una de sus principales herramientas de inyección de liquidez, los acuerdos de recompra inversa (‘repos’) a 7 días, que ya estaban en mínimos históricos.
En el mismo comunicado en el que informó sobre los MLF, el organismo anunció una operación por 235.100 millones de yuanes (32.382 millones de dólares, 29.872 millones de euros) vía ‘repos’ a 7 días al mencionado 1,7 %.
Tras los anuncios del BPC, los cuatro principales bancos estatales del país indicaron que reducirán las tasas de interés por depósitos por primera vez este año tras haberlo hecho en tres ocasiones a lo largo de 2023.
La bajada de tipos, una respuesta cautelosa
La última rebaja de la LPR a un año data de agosto de 2023, cuando el BPC anunció un recorte de 10 puntos, pasando del 3,55 % al actual 3,45 %, una decisión más prudente de la que anticipaban entonces los expertos, que apuntaban a una bajada de 15 puntos básicos ante una recuperación pospandémica menos brillante de lo esperado.
Los expertos ya consideraron entonces que el BPC apostó por la cautela ante la divergencia con otras potencias -donde la tendencia de los tipos ha sido al alza para contener la inflación- y la consiguiente presión sobre el tipo de cambio de la divisa nacional, el yuan, aunque las autoridades ya anticipan un posible cambio de rumbo entre los principales bancos centrales a lo largo de este año.
La institución indicó hoy asimismo que la LPR a cinco años o más, de referencia para préstamos hipotecarios, experimentará un recorte idéntico, pasando del actual 3,95 % al 3,85 %. Su último descenso databa del pasado mes de febrero, cuando bajó 25 puntos básicos desde el 4,2 %, más de lo esperado por los expertos.
Al igual que con la LPR a un año, esta nueva rebaja no entraba dentro de lo pronosticado por los analistas para este mes.
La rebaja a la LPR a 5 años o más podría estar relacionada con el interés de Pekín en reavivar un mercado inmobiliario sumido en una ya larga crisis. El gobernante Partido Comunista (PCCh) indicó en un reciente pleno sobre política económica su objetivo de «prevenir y desactivar los riesgos en (el sector) inmobiliario».
Tras el mencionado recorte de febrero, los analistas apuntaron a que la decisión se debía precisamente a la preocupación de las autoridades por el mercado inmobiliario.