El sueño loco de dos hermanos muy cuerdos. Así definen El Ganso, Álvaro y Clemente Cebrián, sus fundadores. La idea era revolucionar la industria textil, creando una moda «que rompiera patrones. Más desenfadada. Más divertida. Más original».
«El Ganso lo creamos mi hermano Álvaro y yo en 2004 viendo un nicho de mercado en ropa de hombre. Comenzamos vendiendo en tiendas multimarca para pasar a tener nuestra primera tienda propia en Madrid en 2006. A partir de ese momento, fuimos abriendo en Barcelona, Palma de Mallorca, Valencia, Sevilla, Alicante… Hasta poder abrir en 2012 nuestra primera tienda internacional en París», expresa Cebrián.
En la actualidad, cuentan con 150 puntos de venta en distintos países (España, Francia, Portugal, Chile, México y Kuwait), además de vender online y en más de 120 puntos multimarca por todo el mundo. Este año 2023 confiamos alcanzar una facturación en torno a los 68 millones de euros.
Hablamos con Clemente Cebrián de El Ganso sobre su trayectoria y lo que ha significado para ellos recibir el Premio Economía 3 a la Internacionalización.
Internacionalización en la industria textil
– ¿Cómo valorarías el desempeño de El Ganso en el campo de la internacionalización? ¿Cómo se ha llevado a cabo este proceso?
Inicialmente, comenzamos vendiendo a tiendas multimarca para pasar después a abrir nosotros tiendas en distintos países europeos. Ahora tenemos tres vías de crecimiento.
Por un lado, tiendas El Ganso tanto propias (París, Burdeos, Lisboa y Santiago de Chile) como con socios locales (México y Kuwait). Por otro lado, a través de Grandes Almacenes (Galeries Lafayette en Francia, Liverpool en México y Replay en Chile) y tiendas multimarca.
Y, por último, a través de elganso.com con tienda propia en cada uno de los países donde tenemos tiendas propias y así poder aprovechar el stock de las tiendas. También vendemos en Galeries Lafayette online. En 2024 abriremos nuevos mercados en Latam y Asia.
– ¿Cuáles creéis que han sido las principales claves de su éxito?
Además de un equipo de primera, la capacidad de trabajo, ilusión y aguante, hemos pasado épocas mejores y peores, pero siempre se ha creído en El Ganso.
La renovación del producto sin perder el ADN y la apuesta por la marca, nuestro gran forno de comercio, es clave, así por nuestra apuesta por la omnicanalidad física/online.
Una historia de valientes
– Los premios de esta edición premian historias de valientes. ¿En qué momento de vuestra trayectoria la compañía ha necesitado ser más valiente?
En muchos momentos, desde la creación de la compañía hasta el día de hoy. Pero, si debemos destacar uno, diría en pandemia, cuando habíamos vuelto a apostar por El Ganso y nos vino encima todo aquello. Entre todos, creímos en el proyecto y lo repensamos, le dimos la vuelta a todo y la verdad, funcionó.
– ¿Qué planes de futuro tiene la empresa para los próximos años?
Seguir creciendo internacionalmente sin perder el foco. Tenemos muchas peticiones y debemos ser capaces de elegir los socios adecuados es una marca con mucho potencial internacional y también debemos ser capaces de aprovecharlo sin perder la cabeza.
Y seguir apostando por la marca. Hay que cuidarla, es lo más importante.