Laura Yerpes, interiorista: «Ética y belleza no están reñidas, se potencian»
Nuestra Mujer al Timón defiende un diseño con alma, arraigado al Mediterráneo y al corazón, donde cada espacio es tan único como las personas que lo habitan
Laura Yerpes, fundadora de Laura Yerpes Estudio
Desde un icónico estudio en la Finca Roja de Valencia hasta proyectos en Madrid, Tenerife o incluso sobre un yate, Laura Yerpes, fundadora en 2005 de Laura Yerpes Estudio, ha hecho del interiorismo una forma de vida que trasciende estilos y géneros.
Con una sensibilidad cultivada desde niña y un equipo mayoritariamente femenino, reivindica el poder de los espacios con alma, donde lo visual y lo emocional se entrelazan. En esta entrevista, nos abre las puertas de su trayectoria, sus valores y de un liderazgo que escucha, observa y acompaña. Porque para ella, crear es también cuidar.
Laura Yerpes participó en la II edición de los Premios Mujeres al Timón que celebramos en junio.
– La regata que se celebra con motivo de los II Premios Mujeres al Timón ha sido uno de tus primeros contactos con la Fundación. ¿Qué te parece esta iniciativa?
Me ha encantado, me parece una iniciativa fundamental y muy necesaria. Las mujeres necesitamos ser referentes reales además de historias que nos inspiren y que nos hagan sentir acompañadas
Tenemos que poder vernos entre nosotras, mirarnos con cariño. Es importante que se visibilicen los logros de las mujeres, se genere red y sinergias.
Este tipo de plataformas son muy importantes para que una mujer pueda ser escuchada, pueda hablar y nos descubran. Somos muy capaces de llevar adelante una familia y una empresa y que nadie lo ponga en duda.
– ¿Qué te llevó a emprender en el mundo del interiorismo y cuál ha sido la evolución?
Yo sentía que el interiorismo era una vocación innata, una forma de expresarme que me conectaba con la belleza y la sensibilidad. Es decir, con la parte mía más artística.
En 2005 decidí dar un gran paso y poner en marcha mi propio estudio. Tenía muchísima ilusión en este proyecto y en ser independiente. Yo sabía que esta iniciativa implicaba mucho esfuerzo, constancia y trabajo. En ese momento, para mí era esencial demostrarme a mí misma que era capaz de construir algo muy valioso.
Con los años, mi visión ha ido evolucionando de forma más natural. Me he profesionalizado en todos los procesos. Mi equipo está muy consolidado y mi estilo se ha definido. Por todo ello, considero que mi estudio está muy bien posicionado en Valencia ya que se nota que existe una gran experiencia detrás.
También nos define mucho el estilo mediterráneo que llevo en mi ADN y que me ha acompañado siempre. Hemos alcanzado un equilibrio entre el diseño y la parte emocional, que siempre he buscado para cada espacio para que la experiencia fuera única.
– Has mencionado a tu equipo y has hablado en femenino. ¿Son todas mujeres?
Sí, estamos en Valencia, Madrid y Tenerife. Mi equipo ha estado casi siempre integrado por mujeres.

Espacios con su alma y su propia personalidad
– Trabajas espacios que vana desde viviendas a yates de lujo. ¿Cómo sabemos que ese espacio es de Laura Yerpes? Además, has hablado de la peculiaridad de tu capacidad para reflejar el mediterráneo en todos esos espacios.
Cada espacio tiene su personalidad, su alma, su uso, su contexto. Todos comparten algo en común, pero cada uno es diferente. Es como las personas, no hay dos iguales.
Con lo cual, deben hablar el lenguaje entre el cliente y el entorno. Es decir, entre el entorno que tenemos y quién va a utilizar ese espacio.
Para mí las claves están en escuchar y observar antes de ponerse a diseñar. Y, a partir de ahí, adaptar los materiales, los volúmenes, las texturas… Siempre manteniendo una coherencia. Pero cuidando mucho la parte visual y emocional.
El resultado final es que fluye todo y hay que dejarse llevar, pero al principio hay que conectar. Da igual que sea una villa, un restaurante, una clínica, un piso o un yate. Debe ser funcional y conectar con el entorno y con la personalidad de quién va a vivir en él y qué uso va a tener.
– El interiorismo nace en la persona. ¿Qué influencias marcan tu estilo o se ha ido perfilando a lo largo del tiempo? A lo largo de estos 20 años ya.
Yo definiría mi estilo como mediterráneo. Me ha influido la arquitectura tradicional aunque me decanto más por el diseño contemporáneo.
A mí me gustaba observar todos los espacios, puedo estar horas contemplando un lugar, un museo, un palacio… Otra forma de observar es viajando ya que todos estos inputs te van transformando.
De todas formas, siempre he tenido esta sensibilidad. Desde muy joven he sentido pasión por los espacios y cómo podían influir en nuestro estado de ánimo. De hecho, cualquier detalle puede influir en el bienestar de las personas que viven en ese espacio.

El interiorismo va más allá del género
– ¿Consideras que el liderazgo femenino aporta una perspectiva diferente al diseño de espacios?
No, yo creo que no. El interiorismo, el diseño… va más allá del género. Lo que realmente marca la diferencia es la sensibilidad, la educación, la experiencia, la calidad humana, la empatía, el orden… Todas estas cualidades no son un patrimonio de género. Se desarrollan con la observación, con la escucha, con mejorar la vida de las otras personas.
Muchas mujeres con las que he trabajado aportan una visión global y una parte emocional, algo muy enriquecedor para la creatividad, pero no porque sean mujeres solamente, sino porque han decidido mirar de otra manera.
Por ello, cuando hago entrevistas para contratar a personas, intento ver que tengan esa sensibilidad y pasión, que sean nobles. Yo siempre utilizo mucho la empatía cuando hago mis proyectos. Pienso cómo va a estar la otra persona y qué uso se le va a dar en todos los aspectos.
Y esto es lo que a mí me parece que las personas, sean hombres o mujeres, tienen que tener, esa parte creativa, además de valorarse mucho. Por ello, creo que el verdadero valor está en la persona y no en su género.
-¿Qué estrategias implementas para fomentar la participación y el crecimiento profesional de otras mujeres en tu equipo? Lleváis a cabo un trabajo muy de equipo…
Eso es, intento que seamos equipo. Procuro darles voz a las personas que tengo a mi lado, responsabilidades, acompañamiento… y también darles confianza, que haya una colaboración, porque aquí todas opinamos, todas trabajamos.
A veces entra un proyecto y lo puede llevar una persona. Esto no quiere decir que esta vaya a tomar todas las decisiones, sino que todos aportamos nuestro granito de arena y vamos a dar nuestra opinión.
Me gusta también que se sientan importantes, que se sientan válidas con el fin de sacar a la luz su mayor potencial. En definitiva, en mi equipo son la mayoría mujeres y yo apuesto mucho por su crecimiento profesional. Intento ser un ejemplo si puedo y liderar lo mejor que sé. De todas formas, es difícil guiar a las personas porque cada una de ellas es diferente. Con lo cual, tienes que saber qué le das a cada una de ellas para que esta se sienta a gusto.

La ética no está reñida con la belleza
– ¿Cómo ves el futuro del interiorismo y qué tendencias emergentes crees que están irrumpiendo?
Los materiales orgánicos están tomando protagonismo para crear espacios que conectan con el ámbito sensorial. Igualmente, debe haber flexibilidad. Es decir, las viviendas se tienen que adaptar a nuestra forma de vida, no nosotros a la vivienda. Anteriormente hacíamos un diseño y se quedaba ahí y teníamos que adaptarnos a que todo estuviera perfecto. Es al revés. Se tiene que adaptar la casa a nosotros.
Por otra parte, la sostenibilidad ya no es una opción y yo creo que es un ejemplo fundamental de todo lo que viene ahora.
– ¿Cómo se integran las nuevas tecnologías en una vivienda y conseguir que esta siga siendo cálida?
Son lujos que podemos incorporar. El lujo no tiene por qué ser algo ostentoso. Puede ser sutil y aparecer en detalles sencillos, puede estar en nuestro día a día facilitándonos la vida. Es en este punto donde debemos apostar porque la ética no está reñida con la belleza. Al contrario, se potencian.
-Has transformado espacios únicos como un yate en un hotel flotante. ¿Cómo adaptas tu enfoque a cada uno de los proyectos singulares?
En un yate es todo distinto. Es el segundo que hacemos. La primera vez que asumimos un proyecto de esta envergadura, para mí fue un reto y un cambio de escala.
Necesitamos adaptarnos a normas nuevas, muy específicas y a limitaciones técnicas también muy concretas. Se trata de espacios que a veces son más reducidos y que el diseño no solamente debe ser estético, sino que también tiene que ser muy funcional. Se analizaron mucho los espacios, el contexto y sobre todo la experiencia que queríamos generar en el yate.
Crear un yate exige mucha precisión. Es un espacio en movimiento con necesidades muy distintas a una vivienda y requiere también piezas a veces diseñadas a medida, tejidos muy resistentes al ambiente marino y soluciones sencillas, sin recargar.
Chelo, figura clave
-¿Qué figuras o qué experiencias han sido fundamentales en tu desarrollo como líder en el diseño de interiores?
Me encanta que me hagas esta pregunta porque mi madre, Chelo, ha sido mi figura clave porque su capacidad de superación y su fuerza como mujer me ha marcado mucho. Ella me ha enseñado a ser una mujer más valiente y más decidida. Además es una lección de vida que me ha acompañado y me acompaña en todo lo que hago.
También deseo ser yo misma. Tener mi personalidad en mi trabajo, en mi vida, me gusta no perder en este punto. Cuando tienes hijos, pareja, no hay que perder la esencia de uno mismo. Hay que mirarse dentro de una misma y saber lo que una quiere y cómo quiere verse dentro de unos años, qué quiere conseguir y cuáles son sus valores.
También me ha influido la suma de muchas experiencias. Cada error es una fuente de aprendizaje muy grande, porque de ellos se aprenden muchísimo, porque te obligan a cuestionarte, a mejorar y a crecer.
Además, forma parte de la vida. Cuando uno se va equivocando, te das cuenta de lo que no quieres. Espero ser un referente también para otras mujeres que han puesto por hacer su camino.
Gemma JimenoLicenciada en CC de la Información por la Universidad del País Vasco, Gemma Jimeno se incorporó a ECO3 Multimedia, S.A., en 1998 como Redactora y ha participado activamente en el desarrollo de diferentes líneas de negocio. Desde hace años desempeña las funciones de Editora de los contenidos informativos, de los diferentes productos editoriales de E3 Media.








