Los cuatro métodos para saber el valor real de tu empresa en el mercado
Consultor de Negocio Grupo Ifedes
Ante un proceso de operación corporativa, ya sea para vender tu empresa o para incorporar socios, nuestro principal aliado será el valor de nuestra empresa, pero ¿Qué método usar para valorar tu empresa?
En todo proceso de valoración debemos tener siempre en cuenta que en toda operación corporativa existen dos partes: el empresario o vendedor, y el comprador o inversor, con lo que es muy posible que la visión sobre la valoración sea diferente y el método utilizado es fundamental para poder plasmar la imagen más realista del proyecto.
En primer lugar es importante puntualizar el concepto de “valorar una empresa” y atender tanto a los elementos internos como externos que tienen incidencia en dicho proceso.
Un proceso previo a la valoración de la empresa, con independencia del método que se elija, es realizar un análisis sobre la empresa y su entorno, analizando su capacidad de crecimiento y de generar valor en el mercado, posición frente a su competencia, penetración en el mercado y capacidades futuras, capacidad y vías de monetización, equipo humano y profesionalización del mismo, organigrama y valor de su patrimonio, entre otros factores.
En cuanto a los factores externos es importante tener en cuenta, la coyuntura económica presente y futura tanto del país donde realiza su actividad, como de aquellos donde están enfocados sus mercados en caso de empresas con proyección internacional.
Esto nos ayudará a analizar cuáles son nuestras principales fortalezas y debilidades y nos permitirá poner en valor nuestra empresa frente a terceros.
Para esta labor es recomendable acudir a profesionales, de esta forma nos garantizamos, no solo un valor adecuado al mercado, sino una mayor independencia en el método de valor y, en ocasiones, que el valor no se vea condicionado, por otros lazos del vendedor con el proyecto.
Los principales métodos de valoración más estandarizados de una empresa son:
Valor contable
También conocido como valor de balance, es el que viene dado por la diferencia entre el activo real y el pasivo exigible. El problema de esta valoración es que, en la gran mayoría de los casos, este valor no refleja el de mercado. Para determinar un valor contable real se requiere una actualización y rectificación de las cuentas del balance, pues sus partidas suelen aparecer valoradas al precio de coste histórico y no de mercado. Este método puede ser utilizado en empresas con poca complejidad y con poca capacidad de crecimiento.
Valor por descuento de flujos de caja
Este método de valoración es uno de los más estandarizados y, en los últimos años, está tomando fuerza debido a su aceptación, por entenderse como uno de los más científicos y objetivos. Este método intenta determinar todos los movimientos de tesorería que tendrá la empresa en el futuro (se define un umbral de tiempo no superior a veinte años) para luego descontar su valor a precios actuales, se tiene en cuenta el factor riesgo (tasa de riesgo del proyecto, determinado por tres variables principalmente: riesgos de la empresa, del mercado y específicos del sector). Es un método muy exhaustivo en cuanto a la información para estimar el valor de nuestro negocio.
Las fases del proceso son:
– Estimar flujos de caja futuros.
– Descontar el coste de capital.
– Cálculo de valor perpetuo.
El valor de la compañía saldrá de la suma del valor de flujos anuales y el valor perpetuo, menos el valor de la deuda.
Valor por múltiplos comparables
Este método obtiene la valoración mediante la comparativa con otras empresas de la competencia, es uno de los más sencillos pero, en la mayoría de las ocasiones, solo puede ser aplicable a empresas consolidadas con un negocio testado y cuyo crecimiento esperado es estable o sostenido. Se identifican una serie de parámetros (ventas/Ebitda/Bai) que se aplican a la empresa que queremos valorar y se utilizan los multiplicadores estándar del sector de empresas cuyo valor queremos calcular, normalmente son empresas del sector cotizadas, que nos permiten calcular el valor de las acciones balances de las empresas.
Valor por fondo de comercio o Goodwill
Este método obtiene el valor de la empresa mediante el valor de su patrimonio material, más la rentabilidad resultante del rendimiento futuro (una especie de plusvalía).
Los diferentes criterios de valoración para ese rendimiento del activo inmaterial que conocemos como fondo de comercio o goodwill dan dos métodos.
Método Indirecto: Basado en la diferencia entre el valor de rendimiento de la empresa menos el valor sustancial de la misma.
Método Directo: Se calcula mediante el cálculo del rendimiento normal, atribuible al capital invertido. Y la diferencia ente el rendimiento obtenido por la empresa como consecuencia del desarrollo de su actividad y el rendimiento normal constituye lo que llamamos renta goodwill.
El valor del fondo de comercio vendrá dado por la capitalización de ese sobrerrendimiento futuro.
Esto es un resumen de algunos de los métodos de valoración más estandarizados y aceptados en las operaciones corporativas para determinar el valor de una empresa, lo que debemos tener en cuenta para elegir alguno de ellos siempre es: decantarnos por aquel que refleje mejor la realidad de nuestra empresa y siempre es aconsejable utilizar más de un método de valoración.