'Ingeniería Exprés' tras la DANA, la respuesta de la distribución, la logística y el transporte tras el desastre
La DANA que impactó fuertemente en la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre dejó profundos estragos, pero también importantes lecciones que ahora analiza el Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunidad Valenciana (COIICV) en sus jornadas “Ingeniería en Tiempos de Dana”. En el complicado contexto de los últimos meses, el COIICV ha impulsado diversos encuentros de debate para analizar el impacto de estos fenómenos y el papel crucial que desempeña la ingeniería en la reconstrucción y adaptación frente a estos desafíos.
La tercera de estas jornadas se ha centrado en profundizar, de la mano de Esther Carbonell, subdirectora adjunta de Infraestructuras de Ferrocarriles de la Generalidad Valenciana (FGV) y Francisco Javier Quiles, director de Relaciones Externas de Consum, en el papel que la distribución, la logística y el transporte tuvieron en aquellos momentos que pusieron a prueba la resiliencia de sus infraestructuras y servicios esenciales.

Federico Torres presidente de Valencia del COIICV, Esther Carbonell, subdirectora adjunta de Infraestructuras de FGV, Francisco J. Quiles, Director de relaciones externas de Consum y Violeta Frías, directora de Gestión del COIICV.
En el primero de los encuentros impulsados por el Colegio se puso en valor la labor de los equipos técnicos en los sectores de la electricidad y el gas, con la participación de firmas como i-DE Redes Eléctricas Inteligentes, Iberdrola, Nedgia y Grupo Naturgy. La segunda jornada tuvo al abastecimiento de agua y la gestión de residuos como temas principales, y a los expertos de Egevasa, EMTRE o Hidraqua.
Necesidad de una reflexión profunda
Federico Torres, presidente de Valencia del COIICV, inauguró la jornada destacando la necesidad de una reflexión profunda sobre el impacto de la DANA y el rol estratégico de la ingeniería en la recuperación y futura protección de la región. «Desde el COIICV queremos poner sobre la mesa y debatir cuestiones de gran importancia para la reconstrucción de nuestras infraestructuras tras el paso de la riada. Hemos abordado temas vinculados a la electricidad, el gas, la gestión de residuos y el agua. En esta mesa tratamos aspectos de vital importancia como la logística y el transporte», señaló Torres al inicio de la charla.

Federico Torres, presidente de Valencia del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de la Comunidad Valenciana.
Con estas jornadas, aseguran desde el COIICV, los ingenieros buscan dar a conocer de primera mano el relato de los hechos de los testigos principales del desastre. «También conocer los retos y las posibles soluciones innovadoras que han surgido a raíz de esta experiencia. Debemos tomar esta jornada como una oportunidad para fomentar estas soluciones y fortalecer la cooperación de todos los implicados con el gran objetivo de la reconstrucción de la Comunidad Valenciana», afirmó Federico Torres.
Los ingenieros industriales subrayan también el papel clave de estos encuentros para responder a la urgencia de fomentar soluciones innovadoras y fortalecer la cooperación entre actores clave.
El día después del transporte: Ponerse en pie tras el golpe
La magnitud de los daños provocados por la DANA del pasado octubre fue devastadora, aseguró Esther Carbonell, Subdirectora Adjunta de Infraestructuras de FGV, quien relató el impacto en el sistema de transporte ferroviario de la región.
«Las graves inundaciones no causaron daños personales de consideración, pero paralizaron completamente el servicio de la red de Metrovalencia. Un día antes de la DANA habíamos transportado a más de 365.000 viajeros, pero el 30 de octubre la cifra se redujo a cero», explicó Carbonell. El complejo de Valencia Sur, donde se encuentran las instalaciones de mantenimiento y el puesto de mando, quedó anegado, paralizando las operaciones.

Esther Carbonell, subdirectora adjunta de Infraestructuras de Ferrocarriles de la Generalidad Valenciana.
El relato que hizo Carbonell acerca de lo que ocurrió durante el fatídico 29 de octubre, dio buena cuenta de la magnitud del desafío al que se enfrentaron los ingenieros de FGV: «Ya por la mañana registramos que las línea 1 entre Alcudia y Alberic sufrieron desguarnecimientos en varios puntos de su infraestructura. Sin embargo, la falta de un aviso previo impidió prever el desbordamiento del barranco del Poyo, lo que supuso la paralización total del servicio. El agua y el material arrastrado entraron en el complejo de Valencia Sur, devastando las instalaciones, incluido el puesto de mando, cuya operación es esencial para el servicio».
El agua llegó a alcanzar los dos metros de altura en las instalaciones de FGV de Valencia Sur, donde se encontraba el puesto de mando. «No contábamos con un puesto de mando alternativo de respaldo, que en la actualidad hemos trasladado a los talleres de Machado. Actualmente se está instalando una nueva estructura sobre las infraestructuras afectadas, logrando avances significativos para retomar el servicio», aseguró Carbonell.
FGV es una empresa pública, dependiente de la Generalitat Valenciana, responsable de la operación y el mantenimiento de las redes ferroviarias de las provincias de Valencia y Alicante. Bajo la marca Metrovalencia, la firma cuenta con 164 kilómetros de vía, principalmente en el área urbana de la ciudad, donde ofrecen un servicio tipo metro. En 2024, a pesar de los efectos de la DANA, la compañía transportó a 91 millones de viajeros.
La distribución, un servicio esencial tras la DANA
El sector privado también enfrentó un panorama especialmente complejo. Las imágenes de los supermercados arrasados por el agua y los rumores sobre el desabastecimiento de los días posteriores comenzaron a correr por las redes. Francisco Javier Quiles, director de Relaciones Externas de Consum, era consciente de la necesidad de restablecer el abastecimiento lo antes posible y cortar de raíz el miedo que generan los bulos.
«Aunque no somos una infraestructura, ofrecemos servicios básicos esenciales. Cuando ocurrió la riada nadie estaba preparado, la gente necesitaba comida y sobre todo agua. Recibimos los primeros avisos de locales de nuestra marca afectados a mediodía y comenzamos a cerrar las tiendas más afectadas, enviando al personal a casa por turnos. Al final del día, el cierre total fue inevitable», explicó el directivo.

Francisco Javier Quiles, director de Relaciones Externas de Consum.
En la mañana del día 30 de octubre, los saqueos en supermercados fueron una de las imágenes más icónicas. Conscientes del riesgo, en Consum actuaron con celeridad: «La acción humanitaria comenzó antes que el propio balance de daños en la compañía. A pesar de los daños físicos y materiales, canalizamos la ayuda directa a las personas y trabajadores afectados por la riada. Como cadena de supermercados, teníamos que abastecer a las tiendas cercanas a las zonas afectadas para que los clientes afectados pudieran acceder a productos básicos».
La empresa de distribución también recibió numerosas solicitudes de suministros por parte de los ayuntamientos de los municipios devastados y también colaboraron con el aprovisionamiento de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FFCCS). Sus recursos eran limitados y las medidas de seguridad adoptadas tras la catástrofe dificultaron todavía la logística de Consum. «Teníamos policías controlando el acceso de nuestros camiones en determinadas zonas afectadas con su puesto de mando en otros puntos de España, la descoordinación era total», aseguró Quiles.
Un primer balance de daños tras la riada arrojó una cifra de 69 supermercados afectados, 30 de ellos Chárter y 39 propios de Consum. La coordinación con el Centro de Emergencias fue crucial para gestionar la crisis y priorizar la ayuda humanitaria, aseguran desde la firma.
Medidas de ‘ingeniería exprés’: La respuesta de la distribución, la logística y el transporte
Evaluados los daños y analizada la situación, la respuesta de FGV fue inmediata. Según relató Carbonell, se adoptaron «medidas de ingeniería exprés» que incluyeron intervenciones inmediatas y la elaboración de informes técnicos desde el primer día. La prioridad fue trasladar el puesto de mando a los talleres de Machado, ubicados en Alboraya, para restablecer parcialmente el control del sistema que había sido arrasado. «Nuestra prioridad fue acceder a la sala de servidores para rescatar los equipos críticos, lo que permitió recuperar parte del sistema. El principal reto fue tecnológico; muchos sistemas eran obsoletos y necesitaban una actualización urgente».
«Una vez cuantificados los daño, el balance fue desolador. Habíamos perdido gran parte de nuestro equipo, nuestros vehículos y parte de nuestras instalaciones. En total, 19 trenes resultaron dañados, 4 de ellos con desperfectos graves. Otros 8 trenes quedaron aislados en la Zona Sur y se espera trasladarlos en los próximos días mediante tracción diésel, con el objetivo de recuperar el servicio social. Talleres Machado opera a máxima capacidad para afrontar este desafío diario, porque se ha trasladado allí el mantenimiento que se hacía en las instalaciones arrasadas», aseguró la subdirectora.
Las obras de emergencia que ha realizado FGV hasta la fecha, con un presupuesto aproximado de más de 126 millones de euros, se han llevado a cabo sin un proyecto constructivo detallado debido a la urgencia de la situación. Esto se ha traducido en que los técnicos de la compañía han tenido que trabajar con una coordinación minuciosa, explican desde la firma. El plan de restitución comenzó con la recuperación del servicio en zonas no afectadas, lo que requería restablecer la capacidad de mantenimiento y, en paralelo, trabajar en la rehabilitación de las áreas dañadas.
«En nuestra hoja de ruta está previsto restablecer el servicio completo para el verano de 2025, tras haber tardado cinco semanas en poner en marcha el puesto de mando de los talleres Machado. Nos hemos comprometido a ello», concluyó Carbonell.
En el caso de Consum, la acción humanitaria prevaleció sobre el balance de daños inicial. «Comenzamos a entregar alimentos básicos a 1.300 personas, coordinados con la Dirección General de Inclusión y Cooperación al Desarrollo. Ante la falta de camiones, usamos todo tipo de vehículos capaces de circular en aquellas condiciones, los cuales identificamos como operarios de distribución para que las autoridades les permitiesen circular. También colaboramos con la Unidad Militar de Emergencias para enviar agua por helicóptero», explicó Quiles. Además, se tramitaron permisos especiales para la circulación de generadores y personal crítico.
El papel del sector de la distribución, logística y transporte resultó fundamental en aquellos primeros días, las medidas adoptadas fueron las correctas. «Todas las cadenas de supermercados de la Comunidad Valenciana colaboramos estrechamente para evitar el desabastecimiento. Si cada una hubiera actuado por su cuenta, no habríamos cubierto las necesidades de la población», explica Quiles.
«Lanzamos una campaña conjunta con Mercadona para pedir calma a la población, evitando situaciones como las vividas en la pandemia de 2020, cuando se racionaron productos en supermercados. La peor imagen que puede ver la gente es un lineal vacío y, pese a las dificultades del momento, logramos evitarlo», continuó el directivo de Consum.
Prevención, innovación y colaboración, el aporte de valor de los Ingenieros Industriales
El impacto de la DANA ha dejado lecciones claras para todos los actores implicados. Federico Torres resumió la postura del COIICV: «La ingeniería debe estar en el centro de las soluciones para afrontar futuros desastres naturales. La prevención, la innovación y la colaboración son claves para reforzar la resiliencia de nuestras infraestructuras y servicios esenciales».
Desde FGV, se comprometieron a revisar los análisis de riesgos y definir actuaciones claras frente a futuras DANAs. «Reconstruiremos el puesto de mando en una primera planta, elevando la infraestructura crítica para protegerla de futuras inundaciones y reforzando los planes de continuidad del negocio», puntualizó Carbonell.
Carbonell dejó una nota positiva: «Hace tres años invertimos en la redundancia de nuestro centro de procesamiento de datos, lo que permitió restituir el servicio en cinco semanas. Este evento ha evidenciado la necesidad de fortalecer nuestra infraestructura tecnológica y de mejorar la planificación ante emergencias futuras».
Por su parte, Quiles destacó la importancia de reconocer el papel esencial de los supermercados en emergencias. «La DANA subraya que los supermercados de alimentación son un servicio esencial. En futuras emergencias, el acceso a zonas afectadas debe ser prioritario para garantizar el suministro a la población», afirmó. Desde la compañía han tomado diversas medidas, como la implementación de refuerzos logísticos, servicios de autobuses para trasladar a los trabajadores a las plataformas y un servicio de atención emocional que ya funcionaba desde la pandemia. También contrataron a nuevos empleados fijos discontinuos para ofrecer versatilidad a empleados de tiendas cerradas.
«La DANA ha vuelto a subrayar la importancia de los supermercados como servicio esencial. Durante la crisis de precios fuimos vistos como villanos por el incremento de precios, pero esta catástrofe ha vuelto a demostrar el papel crucial que desempeñamos. En futuras emergencias, el acceso a zonas afectadas debe ser prioritario para garantizar el suministro a la población. También será fundamental contar con planes de actuación detallados en caso de eventos como la DANA. Debemos tener unas reglas claras que sean iguales para todos», concluyó Quiles.
La ingeniería ha sido el núcleo de la respuesta ante el desastre, pero también de la planificación de un futuro más seguro y preparado. Esta jornada del COIICV ha evidenciado que el compromiso con la innovación y la colaboración son esenciales para construir un futuro resiliente en la Comunidad Valenciana.
El próximo 7 de abril, la última jornada de ingeniería
El próximo lunes 7 de abril está prevista la celebración del último de los encuentros del COIICV, que supondrá una clausura de alto nivel para estas jornadas centradas en la ingeniería y que contará con la asistencia de Francisco José Gan Pampols, vicepresidente segundo y conseller para la Recuperación Económica y Social de la Comunitat Valenciana.
Este encuentro supondrá el broche final y la presentación de las conclusiones clave de lo analizado a lo largo de todas las jornadas, haciendo énfasis en los retos y soluciones extraídos por los participantes de todas las sesiones. Puedes inscribirte en el siguiente enlace.
Los ponentes de la próxima jornada serán:
- Jordi Azorín, consejero delegado de Hidraqua.
- Emilio José Belencoso, presidente EMTRE.
- Vicente Fajardo, director general de Global Omnium.
- Javier Bon, responsable de planificación región Este de Iberdrola.
- Alfonso Novo, gerente de FGV.
- Vicente Gramuntell, director de desarrollo de negocio deNedgia.
- Francisco Javier Quiles, director de relaciones externas de Consum.