Promotores defienden que la industrialización acabará con la falta de vivienda
«La industrialización es el único camino para resolver el déficit habitacional en materia de oferta» ha manifestado Juan Antonio Gómez Pintado, presidente del Clúster de la Edificación y de Vía Ágora durante la celebración del foro Aprova Lab, puesto en marcha por la Asociación de Promotores de Valencia (Aprova).
En el foro, que se ha celebrado en la sede del Colegio Territorial de Arquitectos de Valencia y que ha tenido como hilo conductor «La innovación y la industrialización en la vivienda», han participado también Antonio Olmedo, presidente de Aprova; Juan Carlos Bandrés, director general de Grupo Lobe; José María Quirós, delegado de industrialización de Aedas Homes; Pepe Fenollosa, gerente de Butech (Porcelanosa Grupo) y Carlos Sanz, jefe de grupo en Proyme.

Los expertos han expuesto los problemas que se están encontrando para el desarrollo de la construcción industrializada entre los que se encuentran la falta de financiación en toda la cadena de valor, mano de obra cualificada, un número escaso de fábricas y con poca capacidad para asumir la demanda actual y la necesidad de la estandarización de los procesos.
Ante esta cuestión, Gómez Pintado ha reflexionado que no se industrializa más «porque no hay capacidad instalada».
José María Quirós ha añadido que «poner en marcha nuevas fábricas requiere de dos o tres años y una gran inversión. Por ello, creo que iniciativas como el Perte nacional como vía para financiar estas iniciativas será importante en el futuro».
Entre sus beneficios, los ponentes han señalado el ahorro de costes, la posibilidad de contar con precios cerrados desde el comienzo, la reducción de desperdicios, disminución de la huella de carbono y un menor uso de la vía pública, entre otros valores.
Pepe Fenollosa ha destacado que en la construcción de una vivienda hay cuatro fases: promoción, proyecto arquitectónico, construcción y cliente final. «Los problemas, en el ámbito de la industrialización los encontramos en las dos primeras porque desde el inicio de la obra no se está pensando en construcción industrializada», ha señalado. «Estamos pensando en doce meses para hacer la obra, pero nos cuesta 16 meses conseguir las licencias», ha manifestado.
Percepción del cliente
Sobre la percepción del cliente ante estas soluciones industrializadas y cómo influye en su demanda, José María Quirós ha destacado que «la industrialización de la promoción residencial a través de los Métodos Modernos de Construcción (MMC) resulta imprescindible para dar respuesta a las necesidades y exigencias de los clientes en la era de la inmediatez y de la sostenibilidad ambiental. Estos métodos reducen los plazos de entrega, suponen una mayor calidad de ejecución y son más respetuosos con el medio ambiente que la construcción convencional».
Porfolio de sistemas industrializados
Sobre el estado actual del porfolio de sistemas industrializados y su implantación en el mercado, Gómez Pintado ha reconocido que «la cantidad de opciones es enorme. Se puede hacer prácticamente todo menos la cimentación. Partimos de unas soluciones básicas y vamos hacia una construcción industrializada con materiales híbridos», ha destacado.
El presidente de Vía Agora ha reconocido que en España «no llegamos ni al 1% en soluciones industrializadas pero el futuro es enorme. Sin embargo, hay que resolver la financiación», ha reiterado.
Para Pepe Fenollosa, la estandarización del proceso de fabricación en la construcción industrializada permite un mejor control de calidad ya que «los componentes se producen en una fábrica bajo condiciones controladas, reduciendo el riesgo de errores y aumentando la precisión en la producción, tanto en instalaciones como en acabados. Esto, a su vez, reduce los costos asociados con la corrección de errores y mejoras posteriores en el proyecto».
El diseño por encima de todo
Juan Carlos Bandrés ha reconocido que «el urbanismo no está pensado para vivienda industrializada. Esta pensada para la construcción con ladrillos». Ha defendido la también la necesidad de la estandarización y ha aclarado que «no empobrece la construcción, porque el diseño está por encima de todo».
Pepe Fenollosa ha reclamado también que la Administración pública «debe incentivar que la industrialización comience a trabajar».
Juan Antonio Gómez Pintado ha reconocido también que «industrializar es sinónimo de calidad» y ha mantenido que se deben analizar los procesos en laboratorios homologados, «sino es así es un suicidio». «Si el día de mañana hay un problema, este se trasladará a todo el sector de la industrialización», ha avisado.
Impacto en la cuenta de resultados
El presidente del Clúster de la Edificación ha aclarado que es más barato construir industrializado que de manera tradicional. «Puede reducir el margen pero incrementa el ROE. Por ello, nuestro objetivo es industrializar para obtener el mayor beneficio posible». En este sentido, ha aclarado que «la construcción industrializada supone un coste de oportunidad ya que permite volver a reinvertir los resultados económicos de una promoción a otra».
El director del Grupo Lobe ha sostenido la necesitad de «poner en el mercado viviendas que la gente pueda pagar«.
Empleo de calidad
También se ha explorado el impacto de la industrialización en el empleo, destacando su potencial para generar puestos de trabajo más especializados y mejorar la productividad del sector.
Artículos relacionados

La IA y la tokenización liderarán el crecimiento del sector inmobiliario en 2025