[mepr-rule id=»598″ ifallowed=»show»]De esas 933, un total de 277  (el 29,69% del total) presentaron en las Cuentas Anuales correspondientes al ejercicio de 2011 un Resultado Financiero positivo; es decir, solo con el rendimiento que obtuvieron de sus inversiones financieras y su tesorería cubrieron los Gastos Financieros. Por lo tanto, su solvencia financiera parece evidente.

Además de estas, otras 251 (el 26,90% del total), tienen un Ratio de Cobertura del Resultado Financiero (RCRF) que supera el 2,5; es decir, su Resultado de Explotación o BAII ajustado es más de 2,5 veces superior al Resultado Financiero obtenido. De mantener este ratio, previsiblemente tampoco tendrán problemas para afrontar sus obligaciones de pago con las entidades financieras.

Sumando ambos grupos, tenemos que el 56,59% de las 933 empresas consideradas en este estudio no ofrecen motivos de preocupación por lo que respecta al cumplimiento de sus obligaciones financieras, pero, sensu contrario, el 43,41% restante de esas 933 empresas líderes por Cifra de Negocio, sí ofrecían al cierre de 2011 unas Cuentas Anuales preocupantes para las entidades financieras que trabajaban  con ellas.

Concretamente, en 150 casos (el 16,08% del total analizado) el Ratio de Cobertura del Resultado Financiero (RCRF) se situaba entre el 2,5 y el 1; es decir, la empresa lograba un BAII positivo, pero probablemente sufriría tensiones de liquidez para atender el pago de intereses, gastos financieros y amortización del principal de la deuda viva.

Y más grave aún es la situación en 255 casos de los 933 analizados (el 27,33%), pues al obtener un RCRF inferior a 1, significa que su Resultado de Explotación o BAII ajustado era negativo; es decir, el negocio ordinario de la compañía no permitía destinar un solo euro a cubrir el Resultado Financiero.

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