Según nos explica Rabek, es normal que en Silicon Valley la gente cambie de empresa con frecuencia. “En lugar de quedarse atrapados en las diferentes compañías, los trabajadores van buscando puestos y proyectos que encajen con sus habilidades y sus intereses”, explica Rabek, y es que según el estudio ‘Decoding the Contradictory Culture of Silicon Valley’, elaborado por Accenture, los trabajadores tienen un compromiso que va más allá de las empresas: crear el futuro.
En este sentido, los profesionales siempre están a la caza de un nuevo y “excitante” proyecto, comportándose más como agentes libres que como empleados fijos y leales a una compañía. El resultado de esta conducta, es una gran bolsa de talento en movimiento, concluye este informe.
Siguiendo esta misma línea, se ha observado que comprometerse con un proyecto, en lugar de con la empresa, genera una alta productividad e innovación, además de propiciar un beneficioso intercambio de ideas y conocimientos entre empresas.
Asimismo, según pone de manifiesto este informe, las empresas están empezando a dejar de competir entre ellas, para empezar a cooperar, llegando incluso a ser clientes mutuos.
Por otro lado, Rabek señala que en el mundo de las empresas nada es constante, todo cambia, incluidos los equipos, por lo tanto, una de las claves del éxito es estar preparados y dispuestos a adaptarse.