Jueves, 21 de Noviembre de 2024
Pulsa ENTER para buscar
Club Empresas Infonif Podcast Rankings Eventos Revistas
Generalitat ayudas DANA

Pablo Broseta, GVA: “La política de cada Estado miembro es política europea, en letras mayúsculas”

El pasado 16 de julio, los eurodiputados reeligieron como presidenta del Parlamento Europeo a Roberta Metsola hasta 2027, con 562 votos en la primera ronda. Su candidatura salió adelante en la primera vuelta, al obtener una mayoría absoluta de los votos válidos emitidos (562 de un total de 623) en la votación secreta con papeletas, entre dos candidatas.

Repasamos con Pablo Broseta, secretario autonómico de Representación ante la Unión Europea y las Comunidades Autónomas de la Generalitat Valenciana sobre los retos a los que se enfrenta este nuevo parlamento. En la agenda se encuentran cuestiones tan importantes como la sostenibilidad, la agricultura, la defensa o la gestión económica, entre otras cuestiones.

P. Broseta, GVA: “La política de cada Estado es política europea, en mayúsculas”

– ¿Qué puede suponer una mayor representatividad de la extrema derecha en el Parlamento Europeo? ¿Cómo puede afectar a todos los retos que tenemos por delante o simplemente a cuestiones como la inmigración o la protección del medioambiente, el cambio climático o un mayor gasto en defensa?

Si atendemos bien a los resultados, buena parte de los partidos que en las elecciones de 2019 se presentaron con discursos de desintegración y desafección de la Unión han cambiado de enfoque y están más cercanos a las políticas concretas y realistas de la Unión. Por lo tanto, no es el mismo escenario, pero sí que se acercan a esa mayoría, ahora fortalecida, que hizo posible la reacción exitosa a la covid-19, el Pacto Verde, la superación de la crisis energética o la unidad frente a la agresión rusa. Por tanto, vamos a seguir avanzando en la misma dirección. Desde la Unión hemos de trabajar en recuperar la política sin estridencias, esa que nos ha permitido crecer; fortalecer nuestros valores y enarbolar valores de justicia, seguridad jurídica, política social y desarrollo.

Seguridad económica

– ¿Cómo está apuntalando la UE la seguridad económica ante países como China, Irán (conflicto en el mar Rojo) y EE.UU., en el caso de que vuelva Trump y reactive sus guerras comerciales?

La coyuntura geopolítica y económica está modificando vertiginosamente el marco en el que habíamos funcionado durante décadas. La globalización ya no funciona como estaba prestablecida. Hay quien dice que la globalización murió como concepto hace más de una década; esta es la era de los intereses geoestratégicos. Hoy debemos atender y estar vigilantes a grandes potencias internacionales que se superponen y tensan permanentemente los equilibrios. Por lo tanto, la UE está replanteando y potenciando la situación con respecto a nuestras dependencias y alianzas. Resulta incuestionable la necesidad de incrementar al máximo nuestra autonomía de tal modo que protejamos a nuestra economía de las guerras comerciales actuales y de las que vendrán.

– La UE ha dejado de encargarse solamente de la gestión económica para pasar a cuestiones políticas, legislativas y fiscales. ¿Cómo puede influir en la forma de legislar y la manera de hacer política de los Estados miembros? ¿Esta cuestión va a tener que cambiar?

La integración europea fue en sus inicios cooperación económica y comercial, pero siempre ha estado en el horizonte una integración completa: política, jurídica, cultural, de defensa y migratoria con valores compartidos. Y eso empezó a ser realidad con la constitución de la Unión por el Tratado de Maastricht, que nos ha fortalecido y cohesionado. Ahora, la política de cada Estado miembro es política europea, en letras mayúsculas, con unos estándares de calidad democrática muy altos. Hemos de ser conscientes de que más de 60% de la legislación de los países miembros viene condicionada por la de la UE.

PabloBroseta-UnionEuropea-02

Pablo Broseta, en su despacho, junto a la imagen de su padre, Manuel Broseta

Autonomía estratégica

– La UE ha salido reforzada de la pandemia y cuestiones como la guerra de Ucrania le han hecho al gigante europeo ver que no puede depender de la energía rusa, de insumos chinos y de la seguridad de EE.UU. Esto se ha llamado autonomía estratégica. ¿Cómo está avanzando esta cuestión?

La autonomía estratégica es fundamental, prioritaria y necesaria para garantizar la estabilidad de nuestra economía y de nuestro modelo social. Debe avanzar sin caer en el proteccionismo ni renunciar a los valores europeos de competitividad, sostenibilidad y cohesión. Y debe articularse alrededor de ejes como la fortaleza de nuestra producción interna, la emergencia climática y una nueva expansión comercial. En esos vectores se están dando pasos muy importantes, como la reindustrialización de regiones europeas, la regulación avanzada de la inteligencia artificial o el posicionamiento de la UE en la reforma del sistema multilateral defendiendo una mayor representatividad de las instituciones internacionales.

Ley Europea de Chips

– En esta misma línea, la falta de semiconductores chinos ha afectado a nuestra industria, especialmente al sector de la automoción. ¿Estamos ya a salvo? ¿Cómo puede afectar también la actual crisis del sector de la automoción ante la incertidumbre sobre el modelo de energía más válido?

Los semiconductores representan el corazón de la economía digital global moderna. El control de su producción es vital, y Europa ha marcado su “hoja de ruta” para alcanzar la autonomía necesaria. La Ley Europea de Chips, que entró en vigor el 21 de septiembre de 2023 va a movilizar una inversión pública de unos 43.000 M€ hasta 2030, y establece medidas para que la UE pueda responder rápidamente a cualquier futura interrupción de la cadena de suministro.

En cualquier caso, hemos de avanzar con mucha rapidez, agilidad y estrategia, especialmente si tenemos en cuenta que la demanda de chips se duplicará de aquí a 2030. De la misma manera, debemos acelerar en la autonomía energética, siempre garantizando el suministro necesario para nuestro sector industrial.

– Por otra parte, la inmigración es un problema que afecta especialmente a España, debido a su posición geográfica. En esta legislatura se ha conseguido firmar el Pacto Migratorio, ¿qué papel va a jugar España en este sentido? ¿Le perjudica dicho pacto, le beneficia…? ¿Cómo va a afectar el hecho de que haya ganado el centroderecha las elecciones?

España es uno de los países beneficiados por este nuevo pacto migratorio como país de entrada. Hay que tener en cuenta que existe en proyección un mecanismo de solidaridad con 600 M€ para gestionar la migración y el derecho de asilo y que del mismo modo se va a disponer de sistemas de corresponsabilidad entre todos los Estados miembros.

Pero quiero recordar que España ha actuado en primera línea durante muchos años, frenando oleada tras oleada gracias a los acuerdos con el Sahel y con el norte de África, y que esta experiencia bilateral es lo que ha servido de base para el pacto europeo. Ese pacto es el punto de confluencia de muchas visiones y la centroderecha ha sido un actor principal para conseguir este consenso.

La agricultura, otro caballo de batalla

– La agricultura es otro de los caballos de batalla de España y nuestros productos, además de sufrir la competencia desleal por la entrada de productos de países terceros como África sin cumplir los mismos requisitos en materia fitosanitaria que los españoles/europeos, sufren los ataques de los agricultores franceses… Esto no habla mucho de unión… Además, se trata de situaciones que se repiten en el tiempo…

Una de las principales medidas reclamadas por los agricultores y ganaderos durante los últimos años ha sido la simplificación de los requisitos de la Política Agraria Común, que ha sido abordada con la adopción de medidas inmediatas por la Comisión. Otros asuntos, como el control fitosanitario o la competencia desleal deben tratarse ponderadamente y considerando sus múltiples aristas.

No podemos rebajar el control sanitario porque afecta a la salud de todos, pero sí debemos incluir exigencias de este tipo en los acuerdos comerciales correspondientes tal y como ya está haciendo la Comisión. Exactamente igual con respecto a los casos de competencia desleal. Deben formar parte de los acuerdos comerciales que ratifica la Unión.

El pasado mes de abril, el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, viajó a Bruselas junto a los principales representantes de las organizaciones agrarias valencianas para reivindicar las necesidades y los legítimos intereses del sector primario valenciano ante las instituciones europeas.

Asimismo, Carlos Mazón intervendrá como ponente del dictamen sobre los retos de la agricultura de la UE en el Comité de las Regiones el próximo mes de octubre. Con esta iniciativa, la Generalitat trata de impulsar una estrategia integral que refuerce la competitividad del sector agrícola europeo.

La propuesta de Mazón se centrará en tres ejes fundamentales para el sector primario valenciano: garantizar condiciones comerciales equitativas, fortalecer los controles fitosanitarios y promover la innovación y cooperación entre regiones, ya que para la Generalitat es esencial que la agricultura europea no solo se adapte, sino que también prospere en un entorno global cada vez más competitivo.

Labora ayudas sin tramites
Rent Bis Adelanto de tus locales
REDEGAL oportunidad de inversion para visionarios
Camara de Castellon Foro Inteligencia competitiva 2024
Labora ayudas sin tramites
Generalitat ajudes DANA

Dejar una respuesta