Son muchas las inquietudes que se suscitaron tras la pandemia en la forma en que funcionaba el mundo laboral. La experiencia del teletrabajo ofreció a muchas empresas un punto de vista distinto y la experiencia de que otras formas de operar eran no sólo factibles, sino deseables. La jornada laboral de cuatro días es una de estas nuevas posibilidad que cada vez está más presente, ¿pero es factible aplicarla?
Por lo general, ha sido en el sector tecnológico donde más ha calado esta propuesta. Prosperity Digital es una agencia barcelonesa líder en la contratación de perfiles del sector digital. La empresa cuenta con un vasto tejido de redes y conexiones forjadas en el ámbito digital internacional durante más de dos décadas. Su experiencia asesorando empresas les ha conferido una idea clara acerca de la posibilidad de una forma diferente de trabajar.
Hablamos con Xavi Sala, Head of Marketing de Prosperity Digital, acerca de la jornada laboral de cuatro días.
¿Una realidad?
-La jornada laboral de cuatro días es un tema que cada vez se escucha más, son bastantes las empresas que están llevando a cabo experimentos con este tipo de horario. Sin embargo hay todavía mucha gente que se muestra reticente. ¿Veremos en algún momento la jornada laboral de 4 días convertido en una realidad?
Se ha convertido en una realidad en ciertos experimentos. Desde el lado del trabajador, una gran mayoría lo desea. Sin embargo, desde el lado del empleador no está tan claro porque existen ciertas dudas con respecto a la productividad. Esta es difícil de determinar, a pesar de que hay algunos experimentos que han ido bien. No se ha probado a largo plazo ni a gran escala.
Existe reticencias por parte del management, porque si le restas un día a la jornada laboral, ¿cómo haces para suplir esa producción? Hay ejemplos de reducción de días, pero aumentando las horas los demás. Esto sería un híbrido, porque al final se trabajan las mismas horas.
Las reducciones de quitar un día, cobrar lo mismo y ser igual de productivo, no creo que se implanten a corto plazo. Habrán ejemplos aquí y allí de empresas que nazcan con esa filosofía. Que las empresas evolucionen a esa mentalidad… lo veo más complicado.
Hay ejemplos que han adquirido notoriedad en los medios que eran, en realidad, reducciones de jornada. Se reducía un porcentaje del suelo y eso no es lo mismo. Es otro tipo de contrato, pero se hizo como a bombo y platillo. Hubo gente que lo tomó, porque cada vez hay más gente que prioriza el tiempo libre. Pero esto no es el concepto de una nueva jornada laboral.
A corto plazo no creo que sea viable en masa. La mayoría de nuestros clientes son digitales en toda Europa, y aquí tampoco da la sensación de que se vaya a implantar. Con la excepción del sector tecnológico, donde el talento es escaso y las empresas lo utilizan para atraer trabajadores cualificados.
Una jornada heredada
-Cada vez son más las empresas que están implementando nuevas tecnologías o adaptando sus firmas. ¿Tiene sentido mantener una jornada laboral tradicional que hemos heredado de un momento en el que no existían estas tecnologías?
Es una buena pregunta. Muy filosófica creo. Podemos ir al plano teórico, en donde te respondería que no tiene sentido mantener nuestra actual jornada laboral. En el plano práctico, lo que termina pasando es que con las herramientas que tenemos aumentan la productividad, pero si te liberan de un trabajo, como escribir correos, acabas haciendo otras cosas.
No liberamos nuestro tiempo, simplemente se quitan tareas que puede hacer la IA, por ejemplo, y acabas asumiendo otras que las máquinas no pueden hacer. No liberamos el tiempo libre de las personas, sino que aumentamos su productividad.
-¿Es necesario que el trabajador pierda salario para implementar esta jornada laboral o eso es algo que escoge el empleador?
Bueno, eso es un balance de riesgos que calcula el empleador. Si alguien se arriesga a probar este modelo, es normal que quiera cubrirse las espaldas en cuanto a gasto. No es necesario, porque si apuestas por un nuevo modelo laboral, deberías hacerlo con todo.
Con la jornada de cuatro días se puede producir lo mismo que cinco. Somos ineficientes y tardamos más de lo necesario, por lo que no es necesario, pero es una forma de asumir riesgos.
Flexibilidad laboral, lo más valorado
-Recientemente en Economía 3 hemos llevado una serie de entrevistas a estudiosos del mundo del management. Lo que nos comentan es que, en base a sus estudios, lo que más valoran los trabajadores es la flexibilidad laboral. ¿Compartís esa opinión?
Totalmente. Se valora muchísimo. No tanto el remoto, que también, sino poder tener esa flexibilidad y decir «hoy me quedo en casa». Es una capacidad que empodera y genera bienestar. Para mí, es francamente el presente y también el futuro.
-Cada vez son más frecuentes las noticias acerca de la dificultad de ciertas empresas de encontrar mano de obra. También estamos viendo cómo muchos trabajadores abandonan sus puestos de trabajo estables. ¿Qué está sucediendo?
Si las cifras que se escuchan son ciertas, es un dato muy preocupante, sobre todo si se alarga en el futuro. Creo que el tiempo que hemos tenido de pandemia dura para reflexionar ha tenido mucho que ver. Mucha gente ha querido dar un cambio a sus vidas y han abandonado trabajos que no les gustaban. Ha dado un toque de atención.
Hay quien lleva mucho tiempo en un sitio en el que no estaba contento y se ha planteado un cambio. Hay realidades distintas en los diferentes sectores. No es lo mismo lo que ocurre en el sector digital que en el sector servicios.
Deberíamos dar más valor a la potencia que somos en turismo, donde tenemos una capacidad increíble. En muchas ocasiones los trabajadores son los que cargan con todo eso, sin tener unas buenas condiciones laborales o sin sentirse valorados. Tienen mucha inestabilidad. Yo creo que se debería intentar poner en valor estos sectores, ya que tenerlos es un valor muy potente.
En cuanto al sector digital, en muchos casos lo que ocurre es que hay escasez de trabajadores. Eso hace que estos profesionales puedan permitirse parar cuando lo necesiten y reengancharse rápido porque el mercado pide su perfil.
¿Menos jornada laboral reduciría el paro?
-¿La jornada laboral de cuatro días puede ser una buena herramienta para reducir el paro y captar talento?
En economías muy avanzadas sí ayuda a reducir paro. Hablo de memoria, pero creo que en Holanda, uno de los países con un mercado más liberalizado, la media de jornada laboral es de 30 horas.
Eso pasa porque, como pasó en su día en Alemania, que consiguieron capear la crisis financiera de forma ventajosa, tienen los llamados minijobs. Este tipo de empleos, bien pagados, permitieron que gente que hubiera estado parada no lo fuese.
En Holanda pasa igual, existe mucho part time job, que permite esta diversificación. Esto al final crea riqueza, siempre y cuando esté bien estructurado y sea posible.