Ingenieros geomáticos reivindican su papel ante la crisis climática
Redacción E3
El método Kaizen ha revolucionado la manera en que los negocios trabajan hoy en día. Se trata de una filosofía de gestión de procesos basada en mejoras continuas. Es decir, un sistema de mejora constante que promueve una mentalidad de mejora continua para alcanzar los objetivos y metas de la empresa. En el post de hoy, veremos qué es el método Kaizen, cómo surgió, para qué sirve, cómo ayuda a la empresa y los pasos necesarios para implementarlo.
El método Kaizen es una filosofía de gestión de la empresa orientada en la búsqueda del perfeccionamiento y basada en la implementación de mejoras continuas. Comprende un sistema de mejora continua a través del cual todo el personal de la empresa es responsable de la mejora de los procesos que ayudan a la empresa a alcanzar sus objetivos a largo plazo. Es decir, que defiende la cultura de la mejora continua como un medio para lograr los objetivos a largo plazo de la empresa.
El método Kaizen proporciona beneficios a los empleados y reduce la influencia de los niveles jerárquicos en la toma de decisiones. Su objetivo principal es realizar las mejoras necesarias de forma continua. A la vez que reducir al máximo las deficiencias en los procesos en busca de la creación de un entorno realmente productivo y eficiente que acreciente la competitividad de las empresas. Para alcanzar este objetivo, está conformado por 7 pasos que van desde la identificación de los problemas hasta el seguimiento de los resultados.
Creado por Masaaki Imai, Kaizen es un término, que viene de la combinación de las palabras japonesas Kai, que significa «cambio», y Zen, «bueno». Es una filosofía de gestión que surgió de la cultura japonesa durante la época de la posguerra en la década de 1950. En sus principios, Kaizen se usó para referirse a la mejora continua. Sin embargo, desde sus inicios, esta filosofía se consideraba un estilo de pensamiento y una mentalidad general.
La filosofía de la empresa se centra en la idea de que, si se puede hacer algo bien, se puede hacer mejor. También sugiere que los problemas deben verse como oportunidades para mejorar las cosas. Uno de sus puntos fuertes es que, sin importar lo mucho o poco que se haya conseguido, se debe mantener el esfuerzo por mejorar continuamente.
El método Kaizen se ha convertido en uno de los sistemas de calidad más exitosos utilizados en la gestión de la empresa. La filosofía Kaizen persigue mejoras constantes de los procesos de trabajo, eliminando las ineficiencias y ahorrando tiempo y dinero a la empresa. Esto permite a la empresa alcanzar sus objetivos a largo plazo y obtener una ventaja competitiva.
De tal manera que, el método Kaizen se utiliza para resolver problemas en todas las áreas de una empresa. Detecta y elimina las pérdidas de tiempo que pueden derivarse de una mala gestión de los procesos de producción. El objetivo del método Kaizen es alcanzar las metas y los objetivos de forma incremental y continua (es decir, sin interrupción). Su prioridad es revisar y optimizar todos los procesos de la organización.
El método Kaizen aporta grandes beneficios a la empresa. Debe implementarse en todos los departamentos y en forma general aplicarse a todos los empleados de una organización. Solamente trabajando en equipo hacia una misma dirección, se logrará cumplir con sus objetivos. Además, los empleados tienen la oportunidad de identificar los procesos que necesitan mejoras, sin prejuicios. De esta manera, se podrán mejorar aquellos en los que están trabajando, previniendo la obsolescencia de las prácticas y reduciendo los costes asociados a la confección de nuevos procesos.
Así mismo, la empresa debe llevar a cabo el proceso de informarse continuamente sobre el estado actual de la organización, evaluar continuamente la situación y guiar a las personas en él.
Veamos a continuación los 7 pasos necesarios para la adecuada implementación del método Kaizen.
El Kaizen no especifica en qué tema debe basarse su filosofía. Corresponde a la empresa determinar un tema en el que basar la mejora. Algunos de los más comunes son la eficiencia del proceso de producción, en particular la mejora de los plazos de entrega o la mejora de la calidad. En otras palabras, ofrecer una mejor experiencia al cliente. Sin embargo, puede ser cualquier área en la que el cliente necesite una mejora urgente.
La selección del equipo de trabajo es esencial. Deben seleccionarse profesionales con amplia experiencia en el área de trabajo que se quiere mejorar. Estos son los empleados encargados de aportar sus conocimientos y experiencia en cada etapa del proceso.
Las actividades de recolección de datos que se lleven a cabo serán la base para identificar las causas del problema. Gracias a ellos podremos definir una estrategia de solución. Se recomiendan las siguientes herramientas para analizar los datos:
En esta fase, se acude a la zona donde se encuentra el problema. A continuación, se comprueban todos los datos obtenidos en la etapa anterior. Por lo tanto, todas las decisiones se toman basándose en el conocimiento de las personas que trabajan en cada área.
Cuando los problemas se consideran críticos, deben resolverse inmediatamente. También, es importante llevar un registro de las fechas de aplicación de las nuevas medidas, así como de las personas responsables de su aplicación y seguimiento.
Todas las medidas adoptadas serán objeto de seguimiento. Si hay problemas, se volverán a analizar los pasos anteriores para comprobar el área de trabajo.
Cuando ya haya pasado cierto tiempo desde la aplicación de los cambios y se observen buenos resultados, se podrá asumir que el problema está controlado. Al mismo tiempo, los cambios realizados deben registrarse para que puedan implementarse en otras áreas de trabajo.
Jesús SantaellaCopywriter y redactor SEO con más de 7 años de experiencia. Colabora con Economía 3 desde el 2019 en temas de marketing, turismo, criptomonedas y economía. Es un apasionado por el marketing digital y las ventas a través de las palabras.
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