• Reducir la brecha salarial entre hombres y mujeres sigue siendo una de las reivindicaciones estrella en la conmemoración del Día Internacional de la Mujer.
• Las mujeres españolas ganan de media 5.726 euros menos que los hombres (21,4%).
• En el caso de la Comunidad Valenciana, esta brecha es algo inferior; las valencianas ganan 5.300 euros menos que los hombres (21,6%).

Como cada 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, las reivindicaciones para conseguir la igualdad real entre mujeres y hombres son muchas. Sin embargo, la reivindicación estrella sigue siendo conseguir, de una vez por todas, la igualdad salarial junto a romper el llamado techo de cristal.  La solución no parece estar muy próxima, ya que la sociedad todavía sigue sin entender que la conciliación laboral y familiar es una cuestión clave para el desarrollo pleno de la mujer en el ámbito laboral y que el cuidado del hogar, de hijos, dependientes, etc… no son tareas exclusivas de mujeres, sino que son responsabilidad por igual de hombres y mujeres.

En cuanto a la reivindicación más notable, la brecha salarial, pese a los años transcurridos desde la entrada en vigor de la Ley 9/2003, de 2 de abril, para la igualdad entre mujeres y hombres en la Comunidad Valenciana, sigue siendo necesario poner de relieve la brecha salarial que existe entre mujeres y hombres y, ello, aunque se observa una leve reducción en los últimos años.

Según UGT, y teniendo en cuenta la última Encuesta de Estructura Salarial del INE del año 2018, la brecha salarial entre mujeres y hombres es de un 21,42 %, prácticamente; lo mismo que en 2008, 21,9%. El salario medio de las mujeres en el Estado español se sitúa en 21.011, 89 euros, respecto a 26.738,19 euros de los hombres. Esto supone que las mujeres ganan de media 5.726,19 euros menos.

Esta cifra es superior en la Comunidad Valenciana ya que se sitúa en un 21,61 %. Esto implica que el salario medio de las mujeres es de 19.235,72 euros, frente al de los hombres: 24.537,07 euros. Así, a trabajos de igual valor, las mujeres ganan 5.301,35 € menos que los hombres.

La brecha salarial en la contratación indefinida ha disminuido, 22,69 %, y se sitúa por debajo de la media nacional. Sin embargo, en la contratación temporal, 16,05 %, existe un crecimiento de la brecha hasta el punto de situarse por encima de la media nacional.

En cuanto a las edades, en los menores de 25 años hay mayor brecha salarial. En el grupo de 45 a 44 años y de 55 a más edad, también existe una brecha bastante alta, 23,98 % y 22,96 %, respectivamente; aunque las dos, afortunadamente, van disminuyendo. Llama la atención que se registren aumentos, en los grupos de 25 a 34 años y 35 a 44 años, donde la brecha es inferior.

En las ocupaciones más bajas, la brecha salarial es muy elevada, 38,56%. Hablamos de salarios que por el tipo de ocupación ya son bajos, a los que hay que unir la desigualdad puesto que lo hombres ganan más.

En 13,2% se sitúa la brecha salarial por hora y, con relación a las pensiones, la brecha en la pensión media anual en la Comunidad Valenciana, en el 2020, se sitúa en el 34,01% por debajo de la media de España que es del 34,76%.

En definitiva y a nivel nacional, las mujeres tendrían que cobrar un 28,6% más para igualar el sueldo de los hombres, según el Informe “Brecha salarial y techo de cristal”, elaborado por Gestha; según los técnicos, para acabar con las diferencias salariales entre mujeres y hombres en España harían falta más de 100 años.

A modo de conclusión, estos datos reflejan una realidad, todavía muy lejana, para terminar con la brecha salarial existente entre mujeres y hombres. Confiemos que los esperados reales decretos, 901/2020, que regula los planes de igualdad y su registro y 902/2020, sobre igualdad retributiva entre mujeres y hombres, ambos de 13 de octubre, sean tan eficaces como prometen y sirvan realmente para reducir drásticamente la brecha salarial entre hombres y mujeres, de tal forma que no vuelva a ser la reivindicación estrella año tras año.

Al igual que es imprescindible abordar la igualdad de oportunidades de mujeres y hombres, entre ellas la igualdad salarial, y la no discriminación por razón de sexo, desde la base; es decir, desde la implementación de la coeducación en todos los niveles académicos sean obligatorios o no.