Jornada Adecco: Detectar el talento y conservarlo es clave para la competitividad de las empresas
Para las economías nacionales, el talento se ha convertido en la clave principal de la competitividad. España, situada en un nuevo escenario de optimismo económico, ha de seguir impulsando medidas que faciliten y sitúen el talento en el centro de las soluciones para el
crecimiento económico y la mejora de la competitividad. Ese talento que conforma nuestro capital humano es la mejor materia prima con la que trabajar en nuestro mercado laboral.
Ayer tuvo lugar en Valencia la jornada “Competitividad a través del talento: creciendo con las personas”, organizada por Adecco, líder mundial en gestión de recursos humanos, y la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD). Dicha jornada ha contado con la presencia de 130 directores de RRHH y empresarios de las principales empresas valencianas.
El acto ha contado con la participación del consejero de Economía, Industria, Turismo y Empleo de la Generalitat Valenciana, Máximo Buch, quien ha asegurado que “en la Comunidad Valenciana sólo tenemos dos elementos que poner en valor: el talento y los recursos naturales como el sol, la playa o el turismo. El turismo supone el 13% del PIB por lo que el resto de nuestro PIB proviene del talento de los valencianos y las valencianas”.
En palabras de Buch: “ La competitividad valenciana por tanto sólo se puede basar en el talento: en nuestro conocimiento, en nuestro esfuerzo y en nuestras capacidades. Cuando dicen que los españoles trabajamos más horas pero somos menos productivos es porque hacemos un mal uso de nuestro talento. Por tanto, hay que poner el foco en esta parte».
Para Víctor Manuel Tatay, director de Adecco en la Comunidad Valenciana, “el talento es un factor de competitividad (…) es un bien escaso en las compañías, muchas veces está oculto y no siempre está bien aprovechado. El talento escasea, y finalizada la crisis nuestra principal misión tiene que ser captar, desarrollar y retener el talento. Podemos comprar tecnología, materias primas, incluso el conocimiento, pero el talento no se puede comprar, ni copiar y siempre distingue a unas organizaciones de otras. El talento se puede y se debe convertir en un elemento de competitividad. Las personas seguirán marcando la diferencia entre unas compañías u otras por mucho que la tecnología siga avanzando.”
Tatay concluía su intervención con los factores que considera clave para salir de la crisis «trabajar en la negociación colectiva, en la política fiscal, en las políticas activas de empleo y un modelo formativo y educativo que promueva y facilite la empleabilidad de los desempleados y también de los ocupados.”
El talento para los empresarios valencianos
A continuación, agentes de diferentes sectores de la economía valenciana han debatido sobre los nuevos caminos que las empresas están emprendiendo para ser más competitivas.
En palabras de Javier Molina, socio del Área Laboral de Cuatrecasas, Gonçalves Pereira, «la reforma laboral ha introducido aspectos
novedosos como el teletrabajo o la propia competitividad y productividad, pero también debería profundizar más en otros aspectos que también aborda, como la flexibilidad.”
Por su parte, Salvador Navarro, presidente de la Confederación de Empresarios de Valencia (CEV), comenzaba su intervención asegurando que «la competitividad a través del talento es muy importante para el tejido empresarial. El problema de nuestro país es la dimensión de las empresas, pues somos en la mayoría de los casos pymes. Hemos ganado posicionamiento internacional en los últimos años, hay que seguir diferenciando productos y estrategias de diferenciación, reforzando nuestro capital humano y apostando en I+D+i»
Además, Navarro aseguraba que “el 94% del tejido empresarial valenciano está formado por pequeñas y medianas empresas y esto es un problema a la hora de atraer el talento pues éste prefiere trabajar en una gran empresa. Además, lo difícil ya no es sólo atraer ese talento sino retenerlo después.”
Pablo Lozano, director de People Everis, centraba su discurso en las nuevas tecnologías y su papel en el desarrollo del talento y la competitividad de las empresas: «Hay cinco competencias que serán determinantes para el futuro. Las competencias transversales son las que más requerirán las empresas en el futuro, además necesitaremos estar informados al segundo, tener adaptabilidad (amoldarnos
rápidamente a los contextos y nuevas culturas con las que trabajamos gracias a la globalización), saber diferenciarse de la competencia para que no te coma el mercado (necesitamos ser eminentemente creativos), tener iniciativa y ser responsables de nuestro propio desarrollo (adquirirán importancia conceptos como la marca personal o el rastro digital) y la alfabetización digital (el dominio de las redes
sociales).”
Por último, Joan Navarro, socio y vicepresidente de Asuntos Públicos de Llorente y Cuenca, ha asegurado que “lo que le falta incorporar al management de las compañías en España es el talento político. Nosotros ayudamos a las empresas a construir su reputación social, la que te hace estar permanentemente en contacto con tu entorno político, el que permite anticiparnos a las nuevas normativas que vendrán. Las compañías necesitan tener talento que entienda ese contexto político-social. Si entiendes ese diálogo político-social puedes participar de él”.
La jornada concluía con una última mesa de debate centrada en “las tendencias de hoy para el talento de mañana”. Algunas de las necesidades empresariales en materia de capital humano se han centrado en el desarrollo de capacidades personales vinculadas a las demandas de las compañías o la necesidad de crear entornos que favorezcan el desarrollo del talento.