El sector químico necesitará una semana para reactivarse debido al ‘gran apagón’

«Tardaremos una semana en llevar a cabo la evaluación del impacto económico, hasta que no finalicen las operaciones de arranque de la actividad completa de las plantas», confirma Juan Antonio Labat, director general de la Federación Empresarial de la Industria Química Española (Feique). Aunque ya advierte que «será significativo».

Tras el corte de suministro eléctrico generalizado, que tuvo lugar el pasado 28 de abril en toda España, la industria química sigue avanzando positivamente hacia la recuperación plena de su actividad operativa.

«Esperamos que durante el fin de semana alcancemos niveles más estables de operación», explica Labat. Sin embargo, advierte que, «la normalización completa podría extenderse hasta una semana, debido a la alta interdependencia de materias primas químicas en la cadena de valor entre las propias plantas y a la necesidad de restablecer por completo las operaciones logísticas».

Aunque en términos generales la mayoría de las instalaciones ya se encuentran operativas, «son pocas las que están trabajando actualmente a plena capacidad de producción, principalmente por motivos de seguridad y por la necesidad de acoplar gradualmente los procesos productivos», matiza el director general de Feique.

Proceso desigual de arranque

Las instalaciones químicas están experimentando un ritmo diferente a la hora de poner en marcha su actividad dada su elevada complejidad y diversidad técnica. «Mientras que algunas plantas han podido evaluar sus unidades de proceso y retomar la producción con rapidez, otras están requiriendo más tiempo para garantizar un arranque seguro», asegura Juan Antonio Labat.

Adelanta también que desde la empresas «no se han reportado, hasta el momento, incidentes de seguridad ni de otra índole derivados del apagón».

Producciones críticas

Con respecto a las producciones críticas, Juan Antonio Labat informa que «la mayor parte de la producción de oxígeno quedó restablecida al día siguiente del apagón». «Aunque alguna unidad retrasará su entrada en servicio, la producción necesaria está garantizada», corrobora Labat.

El director general de Feique revela también que «tampoco existe riesgo de desabastecimiento de cloro, ya que la mayoría de las plantas están operando, aunque a diferentes niveles de capacidad de producción, pero con una evolución positiva prevista para los próximos días».

Impacto significativo

Por el momento, avisa Juan Antonio Labat, «resulta prematuro realizar una estimación precisa del impacto económico que este incidente ha provocado sobre la industria química». No obstante, «prevemos que será significativo, en línea con el resto del sector industrial, especialmente considerando que algunas plantas todavía se encuentran en fase de pruebas y ajustes» destaca.

De todas formas, «podremos realizar una valoración más precisa tan pronto como se disponga de información suficiente que permita evaluar con mayor exactitud el alcance real del impacto», explica Labat.

Desde Feique mantienen contacto permanente con el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo para seguir actualizando la información sobre el estado del sector.

1.600M€ más a pagar por el Consorcio

Antonio Garamendi, presidente de CEOE, ha valorado en unos 1.600 millones de euros, un 0,1% del PIB, el impacto del apagón sufrido por nuestro país y ha apuntado al Consorcio de Compensación de Seguros (CCS) ante posibles reclamaciones.

Garamendi ha reconocido que el impacto es muy elevado y ha puesto explicado que industrias como las refinerías van a tardar semanas en ponerse en marcha y lo mismo puede ocurrir con empresas de altos hornos.

Sobre quién deberá afrontar las posibles reclamaciones que tengan lugar, el máximo representante de la patronal española ha afirmado que aún se está mirando «pero que puede corresponderle al Consorcio de Compensación de Seguros».

Los autónomos, los más perjudicados en la CV

Desde la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) explican que «las grandes empresas ya han garantizado su puesta en marcha».

Por el contrario, «el colectivo de trabajadores autónomos y pequeños negocios ha sido uno de los más perjudicados por el apagón al no contar habitualmente con sistemas de respaldo energético ni con recursos para mitigar rápidamente este tipo de contingencias. Esta situación provocó que muchos autónomos vieron interrumpida su actividad de forma inmediata, lo que evidencia su especial vulnerabilidad ante cualquier interrupción del suministro», añaden las mismas fuentes.

En cuanto al volumen de pérdidas económicas que ha podido ocasionar el apagón, desde la CEV no disponen todavía de datos precisos al respecto.

Por otra parte, desde la CEV han solicitado a las autoridades competentes la ampliación de los plazos,  para todos los procedimientos y expedientes administrativos de la Administración. Esta petición busca facilitar que tanto empresas como particulares puedan cumplir con sus obligaciones sin verse perjudicados por la interrupción del servicio eléctrico.