Estas son las nuevas formas de trabajo que los directivos buscan implantar
La pandemia puso patas arriba todos los elementos de la sociedad tal y como la conocíamos. Ese antes y después también llegó al mundo laboral, que tuvo que evolucionar y adaptarse a una realidad nueva y cambiante. En este contexto, un nuevo estudio la Asociación Española de Dirección y Desarrollo de Personas (AEDIPE) ha puesto el foco sobre las nuevas dinámicas laborales en el ecosistema del trabajo español.
Más de 500 directores de recursos humanos, directores generales y CEOs han participado en la elaboración de este texto. Entre las principales preocupaciones de estos se encuentra la organización de proyectos, la salud integral de los trabajadores o el rendimiento. La innovación y la digitalización son, a día de hoy, los desafíos que más preocupan a los directivos.
El texto ha sido elaborado desde el «Think Tank» de AEDIPE, contando además con la realización práctica de la consultora Salvetti&Llombart.
Flexibilidad y trabajo parcial
Entre las principales novedades en las dinámicas laborales surgidas tras la pandemia de Covid-19, está la consolidación del teletrabajo. En un momento crítico para los negocios, las empresas han aprendido a desarrollar la flexibilidad y la reorganización como respuesta a estas dificultades.
Esto ha llevado a un incremento de la flexibilidad horaria cercano al 40% y a una reducción de los tradicionales horarios rígidos. Este proceso ha de llevarse a cabo dentro de un marco normativo de común acuerdo entre empresa y trabajador. Así pues, se hace patente la implantación de un modelo híbrido, donde el trabajador repartirá su jornada laboral de manera presencial y en remoto. Si la presencialidad 100% suponía el 76% previo a la pandemia, se verá reducida a únicamente el 36%.
El teletrabajo fue uno de los grandes protagonista de la pandemia. Las circunstancias hicieron que se instaurase de manera generalizada, más del 55% de trabajadores recurrió al teletrabajo durante la pandemia. Si bien este porcentaje se ha reducido con la llegada de la nueva normalidad, en la actualidad un 38% de los trabajadores continúa realizando alguna modalidad de teletrabajo, mayoritariamente híbrida.
Productividad y digitalización
No obstante, adaptar estas nuevas dinámicas laborales supone un desafío para las empresas. Los directivos necesitan formas de llevar a cabo un seguimiento del mismo para asegurarse de que no afecta negativamente a los resultados del trabajo. Las empresas buscan herramientas de organización, control y seguimiento que doten a esta flexibilidad de rigor y confianza.
Para ello, la digitalización es clave; ya sea a modo de software donde se controlen las horas de trabajo realizadas mediante la opción de trabajo en remoto, implantado por el 28% de empresas. Otras alternativas disponibles son las aplicaciones informáticas más sofisticadas que permiten además un seguimiento de procesos, actividades o proyectos llevados a cabo por el empleado.
En términos de digitalización, todavía un número relativamente pequeño de las empresas, un 23% del total, contemplan un cambio en el futuro hacia una mayor adquisición de herramientas online. Esto supone un aumento de 13 puntos porcentuales de con respecto a prepandemia.
Es decir: solo algo más de 2 de cada 10 empresas han desarrollado hasta el momento un plan estratégico dentro de la organización con relación a su incorporación clara y definida al mundo digital.
Captación del talento en pequeñas y grandes empresas
El tejido empresarial español presenta una gran tipología de empresas, si bien las pymes siguen suponiendo la gran mayoría del mismo. En este sentido, un 63% de las medianas y grandes empresas identifican como prioridades el liderazgo y la gestión de equipos o la digitalización y centran su estrategia del medio plazo en la gestión del talento. Las PYMES en cambio, se focalizan en la productividad de los modelos de negocio.
A menudo esto se traduce en un mercado laboral menos centrado en el bienestar del trabajador. El talento y su retención, especialmente en algunos sectores, preocupa y mucho dentro de los departamentos de recursos humanos de las empresas. Esto se traduce en que, mientras el 70% de las entrevistas que se realizaban previas a la pandemia eran personales, en la actualidad no superan el 50%.
En cambio, las entrevistas online van a suponer un 43% del total o las pruebas de competencias un 33%; tras incrementos comparativos previos a la pandemia del 23% y del 20%, respectivamente.
Una nueva gestión enfocada en el bienestar laboral
Las nuevas dinámicas laborales fluctúan hacia los espacios de trabajo en los que los puestos fijos van desapareciendo en favor de los espacios sin puestos fijos. La oficina del futuro presenta pocos despachos, muchas áreas colaborativas, espacios de socialización y es responsable con el medioambiente.
Mientras las empresas de servicios encabezan actualmente la transformación de los espacios de trabajo, con un 51% de ellas dispuestas a hacerlo en un periodo no superior a 5 años; otros sectores, como la educación, la sanidad o la gran industria, se encuentran aún muy lejos de este porcentaje, situándose en un 12% y un 22%, respectivamente.
La importancia de la salud ha adquirido una relevancia central tras la pandemia. Esto ha llevado a que 6 de cada 10 empresas hayan implementado medidas para mejorar el bienestar de sus trabajadores. Estas medidas se han materializado en diferentes acciones: desde ayuda psicológica, formación física, mejoras en la alimentación o gestión de los descansos.
La gran tarea pendiente, sin embargo, es la desconexión digital de los trabajadores fuera de su horario laboral. Pese a la importancia que se da a la salud digital, no se ha incrementado de igual manera la implementación de medidas para la desconexión digital, en horario de trabajo y fuera de ese horario. Así solo un 15% de las empresas utilizan herramientas para que sus trabajadores desconecten de las aplicaciones digitales que utilizan en su actividad laboral.