El pasado 16 de diciembre BME publicó el Informe de Mercado 2020, en el que se hace un balance de lo ocurrido en la economía mundial y, en especial, en los mercados de valores durante el ejercicio. Este Informe recoge las principales conclusiones de un año marcado por la pandemia de la COVID-19 y el anuncio de la vacuna, así como por la integración de BME con el Grupo SIX.

En el Informe se indica que el año 2020 será recordado por el gran impacto que la pandemia y la lucha contra el virus deja en la sociedad mundial. La lucha contra el virus en todos los países ha confinado o paralizado, total o parcialmente durante muchas semanas, actividades que representan cerca del 70% de la economía mundial, llevando al PIB global a una contracción histórica, que el FMI cifra en una caída del 4.4% en 2020, la mayor desde que existen registros.

En España, el FMI espera que su economía registre una de las mayores caídas entre las economías avanzadas, con un descenso del 12,8% en 2020. Esto teniendo en cuenta el impacto que la gestión de la pandemia ha tenido en el sector del ocio, restauración y turismo, que tienen un peso significativo en la economía española.

En este contexto económico, el Informe resalta la respuesta que han dado los bancos centrales y gobiernos del mundo al implementar y promover programas de ayudas monetarias y fiscales de una intensidad y tamaño sin precedentes para tratar de paliar los efectos y combatir el shock económico.

En lo que respecta a los índices bursátiles mundiales, el Informe recoge que durante este año hasta finales de noviembre han presentado ascensos entre el 8% y el 10%. Una evolución marcada por la volatilidad con una generalizada y aguda caída en el mes de marzo y la posterior recuperación en un extraordinario mes de noviembre para las Bolsas mundiales tras conocerse la efectividad de las vacunas.

La explicación del balance moderadamente positivo de los indicadores agregados de las Bolsas mundiales se debe a factores como las políticas monetarias expansivas sin precedentes de los bancos centrales, el éxito de China en la lucha contra el virus o el creciente peso de sectores y empresas, principalmente en Estados Unidos, que han salido reforzadas de la pandemia como puede ser el sector sanitario o el de las nuevas tecnologías de la información aplicadas a múltiples ámbitos de la economía.

En lo que respecta a España, el Informe indica que la base inversora de la Bolsa española se mantiene amplia y diversificada. El mercado ha sido muy efectivo a la hora de canalizar ampliaciones de capital con el objetivo de fortalecer las estructuras financieras de las empresas cotizadas debilitadas por la reducción de la actividad. BME Growth y el MARF se consolidan en 2020 como fuentes de financiación para todo tipo de empresas.

En España, hasta septiembre, se han incorporado en todos los mercados 10 empresas, 9 de las cuales se han admitido a cotización en BME Growth. En cuanto al MARF, ha sido un año muy relevante, especialmente después de ser elegido para canalizar una línea de avales por parte del ICO en respuesta a la crisis sanitaria.

De cara al año 2021, el informe resalta que pese al estado actual de la economía, se prevé que la actividad repunte y que registre tasas de crecimiento sólidas. Todo ello gracias a una menor incertidumbre ligada a la situación sanitaria y al efecto de las políticas monetarias y fiscales implementadas tras el estallido de la pandemia, siendo además España uno de los países más beneficiados por el plan de recuperación de la Unión Europea.