Scandit, empresa de visión artificial móvil y realidad aumentada, ha creado una aplicación móvil para automatizar el proceso de captura de datos en pruebas COVID-19. Esta herramienta busca que el sistema hospitalario «ahorre tiempo en esta recogida y que esto se haga evitando el contacto con el paciente para salvaguardar la protección del personal hospitalario», explica José Luis Rico, sales director para el Sur de Europa de Scandit.

Rico detalla que, mediante cualquier smartphone con cámara, los profesionales de la salud escanean la identificación de una persona, escanean el código de barras en la muestra de prueba para que coincida con la persona y luego imprimen o exportan los datos capturados. «Este enfoque sin contacto evita la necesidad de manejar la documentación de identificación o capturar datos manualmente, además de eliminar los errores de entrada de datos», detalla.

«Esta app combina el reconocimiento de texto y el escaneo de códigos de barras para escanear tarjetas de identificación de pacientes y pasaportes con zonas legibles por máquina (MRZ) y licencias de conducir que utilizan el código de barras en el reverso de la licencia. Para los tubos de recogidas de muestras, la app admite las siguientes simbologías de código de barras: código 128, EAN13, código QR, micro QR y data matrix», precisa.

Rico: «En el Hospital de Leeds utilizaron esta tecnología y calcularon ahorros de tiempo de hasta el 95 % y otros económicos»

Así, indica que los datos de la identificación del paciente y del código de barras de la prueba se captan «prácticamente en tiempo real gracias a los rápidos sistemas de escaneo». Además, puntualiza que la aplicación cumple con la normative HIPPA, por lo que no almacena o guarda información ni datos personales tras el escaneo, asegura.

Esta herramienta, para la que han utilizado la tecnología SDK de escaneo de código de barras, ya está disponible para descargar en los móviles. De hecho, subraya que el Hospital de Leeds NHS, cliente de Scandit en Reino Unido, ya ha utilizado previamente la misma tecnología de escaneo en su proyecto Scan-4-Safety. «Calcularon ahorros de tiempo de hasta el 95 % y otros económicos con el uso del smartphone para registrar las pruebas médicas», garantiza Rico. En España, apunta que tienen constancia de que la aplicación ha sido descargada, pero matiza: «Todavía es pronto para tener detalles de uso por parte de los hospitales».

José Luis Rico, sales director para el Sur de Europa de Scandit

En cuanto a posibles utilidades además de pruebas COVID-19, el sales director para el Sur de Europa de Scandit desgrana que puede utilizarse para todos los niveles de gestión de datos de pacientes. «Existen muchos casos en los que se está usando el software de escaneo a nivel medio y empresarial. Las organizaciones médicas pueden implementar dispositivos inteligentes equipados con cámara para que los trabajadores de la salud escaneen identificaciones de pacientes, muestras, medicamentos y suministros. Es una forma rápida y rentable de mejorar la seguridad del paciente y la eficiencia en los flujos de trabajo, como el seguimiento de medicamentos, la verificación del paciente, el registro y el rastreo de pruebas de sangre, por ejemplo», resalta.

Por otro lado, en cuanto a la salud digital, defiende que este tipo de proyectos «deberían acelerarse desde ya». «Servirían para actualizar los sistemas e implementar el software de escaneo en dispositivos inteligentes para automatizar los flujos de trabajo manuales, cumplir con las regulaciones y liberar a los médicos para que puedan dedicar el tiempo necesario a atender a los pacientes. Los trabajadores de salud solo tienen que escanear las identificaciones de los pacientes, las muestras, los medicamentos y los suministros para reducir los errores humanos y acelerar los flujos de trabajo», sostiene Rico.