Los afectados en la Comunitat Valenciana por expedientes de regulación de empleo (ERE) han aumentado un 52 % en 2019, con 27.494, por las medidas tomadas durante el año en la fábrica de Ford de Almussafes. En el conjunto nacional más de 30.800 trabajadores se vieron afectados en 2019 por un despido colectivo, un 55 % más que en 2018 y el primer incremento anual desde 2012, impulsado por los ajustes de empleo en banca y comercio.

Según la estadística que publica el Ministerio de Trabajo, un total de 88.927 trabajadores se vieron afectados por alguna medida de regulación de empleo en 2019, un 22 % más que en 2018 encadenando dos años al alza y en cifras similares a las de 2016.

Junto a los 30.871 afectados por despidos colectivos, fundamentalmente por EREs en banca y comercio; 55.285 trabajadores sufrieron suspensiones de contrato durante el año, un 12 % más, en su mayoría, en el sector automovilístico. El resto, 2.771, estuvo afectado por una reducción de jornada, con un descenso del 23 % frente a 2018.

Asimismo aumentaron en 2019, tras seis años de descensos, el número de empresas afectadas por alguna medida, un 4,5 % hasta las 2.169, y el total de procedimientos iniciados, un 3 % hasta los 3.220, de los que el 90,4 % terminaron con acuerdo. Por sexo, el 72 % fueron hombres y el 28 %, mujeres con alzas del 18,9 % y del 30,7 % respectivamente.

De vuelta a los inmersos en un despido colectivo, la cifra supone, además de ese primer repunte desde 2012, el mayor alza desde 2009 cuando esa cifra se incrementó en un 56 % hasta superar los 63.000 trabajadores afectados en un solo año.

En 2009 se alcanzó el récord de total trabajadores inmersos en alguna medida con 549.282, la mayoría, 465.215 por suspensiones de contratos. Tras caer en 2010, los despidos colectivos volvieron a repuntar en 2011 y 2012, un 29 % y un 22 %, respectivamente para descender durante los seis años siguientes. En cuanto a las suspensiones de contratos, la subida de 2019 es menor que la del año pasado cuando repuntaron un 75 % tras cinco años de caídas.

Por sectores, industria y servicios aglutinaron la mayoría de afectados con 52.175 en el primer caso, un 16 % más que en 2018, y 33.680 en el segundo, un alza del 33,7 %. Por tipo de medida, los servicios coparon el mayor número de afectados en despidos colectivos con 20.312; mientras que la mayoría de las suspensiones de contrato fueron en la industria con 41.857 afectados. Por subsectores, la mitad de estos afectados -28.748, un 5 % mas- lo fueron en fabricación de vehículos de motor.

En cuanto a los despidos colectivos, destacan servicios financieros, con 4.762 afectados, un 50 % más, y comercio al por menor con 4.245, el triple que en 2018, seguidos por fabricación de material de transporte, con 1.829 frente a los 66 de 2018. Por regiones, tras la Comunitat Valenciana se sitúan Madrid, con 13.498 afectados, un 13,8 % más, y Cataluña con 11.898, un 78 % más.