Las encuestas apuntan un descenso en la confianza que los valencianos depositan en Unides Podem, pese a ello el candidato a la presidencia de la Generalitat de la formación morada, Rubén Martínez Dalmau, se muestra positivo y apunta al «sprint final» para la «remontada«. Proteger el talento regional, promover el Plan de Acción Territorial Sectorial del Comercio de la Comunitat Valenciana (Patsecova) o poner en marcha la conselleria de Feminismo y LGTBI son algunas de las propuestas que hace Unides Podem en esta campaña para las elecciones autonómicas del 28 de abril.

-En primer lugar, ¿qué valoración hace de los 4 años del gobierno del Botànic?

-Es evidente que, tras 20 años de corrupción y cloacas, en estos cuatro años de Botánic son visibles resultados de regeneración institucional y nos aleja de aquellos episodios oscuros con el PP, algo que supone un pequeño paso para que se produzca el cambio.

Pero, aunque se pueda hacer un balance positivo, no es momento para recrearse y compararnos con la gestión criminal previa, aún queda mucho por hacer, la gestión de esta legislatura no ha sido suficiente. El Botànic es un modelo de colaboración que tiene un largo trayecto por delante y al que se le presentan retos que no permiten perder ni un minuto más. Es necesario actuar sobre el modelo económico, productivo, industrial y sobre las políticas medioambientales, algo en lo que el Consell ha fallado.

Cuando llegan elecciones se nos para el reloj y muchos cargos públicos pretenden hacer balance de una gestión decente, pero no tenemos tiempo para eso, ahora es necesario formar un Consell con conciencia sobre las necesidades actuales para el territorio valenciano, en este sentido, la sociedad valenciana sigue por delante de los partidos y nos exige una mayor valentía y decisión para abordar grandes retos del presente.

-Apunte un logro y una cuestión que se haya quedado pendiente esta legislatura.

-No diría una medida concreta, creo que es más relevante hablar del cambio que se ha producido en la identidad valenciana, la cual ha dejado de verse relacionada con el seno de la corrupción y de las cloacas del PP.

Es cierto que no se trata de algo material, pero es un elemento esencial para fortalecer los lazos sociales de las valencianas y por ello, Podem ha puesto todo el esfuerzo y empeño posible para corregir cualquier rumbo del Consell que recordará a “tics” del pasado. Por tanto, el logro ha sido una verdadera revolución ética y un modelo de entendimiento para gobernar, fue una demostración de que sí se pudo y de que sí se puede.

«El logro ha sido una verdadera revolución ética y un modelo de entendimiento para gobernar»

Es difícil apuntar a una cuestión sin resolver porque son muchas, aunque especialmente el hecho de que Francisco Camps continúe en el Consell Jurídic Consultiu me resulta bochornoso, no merece poner un pie en instituciones públicas. También se quedan cuestiones como la no reversión del Hospital de Denia, así como de la abstención del PSPV y Compromís ante la ley sobre el cambio climático y sobre todo la negativa del PSPV a la tasa turística.

-¿Se arrepiente Podem de no haber entrado en el gobierno del Botànic?

-Las demandas de la ciudadanía son a las que nos debemos y no al reparto de sillones. Nosotras cumplimos con el compromiso de facilitar un gobierno que abriera una nueva etapa. Queríamos distanciarnos de dinámicas del bipartidismo y así se hizo también en España, nosotras no firmamos cheques en blanco.

Si nos trasladamos a aquel momento, de nuevo entendemos que no fue un error, sino una demanda ciudadana que pedía un cambio en la gestión. No queríamos ponernos a discutir por los sillones, sino que nuestra deuda social nos concienció de la necesidad de facilitar un gobierno de coalición que echara al PP y al que pudiéramos marcarle el rumbo, lo antes posible, algo que fue una decisión general en toda España. Era necesario un cambio de gestión para las valencianas, distanciarse del bipartidismo, no podemos gobernar con un PSOE con deuda bancaria a la primera de cambio.

-Las encuestas señalan una pérdida de confianza a Podem, al menos en escaños. ¿En qué se ha fallado y cómo ven ustedes su futura representación en Les Corts?

Las encuestas suelen tener tendencia a publicar esquelas de Podemos. Si recordamos en 2015 estábamos en niveles críticos y acabamos siendo tercera fuerza. Se ha certificado nuestra muerte en reiteradas ocasiones, prácticamente desde que nacimos.

Es una repetición del “no se puede”, invitan a pensar que la historia ya está escrita, pero lo cierto es que el electorado de Podemos es consciente de lo que nos jugamos en estas elecciones, por eso, la remontada es posible y la historia no está escrita, además siempre contamos con el sprint final.

Seguramente habremos fallado en varias cosas, pero también hemos aprendido mucho de las instituciones en esta legislatura, algo que nos proporciona una panorámica ampliada y experiencia para encabezar un proyecto ganador.

El candidato de Unides Podem-Esquerra Unida a la Presidencia de la Generalitat, Rubén Martínez Dalmau, y la número dos de su candidatura, Rosa Pérez Garijo, en la presentación del programa electoral de la coalición para las elecciones autonómicas del 28 de abril. EFE/Kai Försterling

-¿Cuáles son las principales propuestas de su programa económico para mejorar la situación de la Comunitat Valenciana y de su ciudadanía?

Una de las medidas más ambiciosas consiste en el establecimiento de una nueva banca pública valenciana que fomente inversiones inteligentes, como el plan valenciano de rehabilitación de vivienda, inversión en transporte no contaminante, y lo más importante, impulsar una industrialización inteligente dando gran importancia a la inversión en I+D+i. Hablamos inversión con lógica verde, que no solo mejora la vida de las valencianas, también creará nuevos puestos de trabajo de calidad, fomentará el modelo económico cooperativista y asentará un nuevo sistema productivo menos explotador y más humano.

Otra de las propuestas más destacadas trata de fomentar la transición verde con la creación de una empresa pública energética que garantice a la sociedad e industria valenciana a depender de sí misma y autoabastecerse energéticamente, además de obtener una progresiva bajada en la factura de la luz.

-Las demandas de la CEV a los candidatos a la Generalitat apuntan a cuestiones como aliviar la carga administrativa y fiscal de las empresas, pagarles en plazo, reducir los costes laborales y evitar que las licitaciones se conviertan en subastas. ¿Las contemplan en su programa?

-Uno de nuestras grandes propuestas es que no entren a subasta todas aquellas empresas públicas que hayan sido corruptoras, es decir, una prohibición taxativa de contratación pública con empresas vinculadas a casos de corrupción.

Respecto a la carga fiscal, nos proponemos introducir en el ecosistema empresarial lógicas de redistribución que favorezcan a PyMES y autónomos, aumentando la presión fiscal sobre grandes empresas y multinacionales. De esta forma garantizamos el alivio fiscal de la pequeña y mediana empresa.

-En este sentido, preguntarle por cuál es la política fiscal que planea su partido, ¿subirá los impuestos? ¿En qué medida y mediante qué figuras impositivas?

-Nuestra propuesta es crear una Agencia Tributaria Valenciana con competencias sobre el control y recaudación de impuestos propios y cedidos, fraude fiscal, servicio de recaudación municipal y el resto de competencias establecidas en la ley. La lógica a seguir, es establecer un sistema tributario progresivo y llevar a cabo un estudio sobre el conjunto del sistema tributario para hacerlo lo más redistributivo posible.

«Proponemos reducir tributos que afectan a rentas medias y bajas»

De esta forma proponemos reducir tributos que afectan a rentas medias y bajas, aumentando el esfuerzo de las rentas más altas y patrimonios de quienes más tienen. Es un modelo más justo socialmente, y con mayor capacidad de recaudación para financiar los servicios públicos. Y como afirmaba en la pregunta anterior, operamos con la misma idea con las empresas, pidiendo un mayor esfuerzo a las empresas más grandes y multinacionales, a cambio de aliviar la carga de la mediana y pequeña empresa.

-¿Mantienen su propuesta a favor de implantar una tasa turística? ¿De qué modelo?

-Sí, queremos implantar una tasa turística autonómica con tramos municipales y la finalidad de que dichos ingresos reviertan en el territorio compensando el uso de los servicios públicos e invirtiendo en un turismo sostenible que cuide nuestro medio ambiente. Pero no estamos hablando de algo inusual, ya se ha hecho con mucho éxito en Baleares y Catalunya.

Recordemos que el turismo es muy significativo en nuestro PIB, pero a la vez acarrea un gasto adicional para el mantenimiento del espacio público, por tanto, una parte de los ingresos que genera debería repercutir en la sociedad y en amortiguar sus impactos en las instalaciones. No solo buscamos la reparación urbana, también queremos concienciar de que no puede haber turismo de calidad en barrios degradados y vaciados de vecinos, con servicios prestados por trabajadores precarios en litorales masificados y parajes naturales destruidos.

Respecto a esta problemática, me he reunido con kellys de Benidorm que cobran 1,5€ y 3€ por habitación arreglada, algo que es indigno para el esfuerzo de una trabajadora, no podemos tener un modelo en el que se reproduce el trabajo precarizado y se somete al turismo barato.

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias (d), ofrece un mitin junto al candidato de Unides Podem-Esquerra Unida a la Presidencia de la Generalitat, Rubén Martínez Dalmau (i). EFE/Biel Aliño

-¿Qué se puede hacer para cambiar el modelo de financiación autonómica?

-Nuestra propuesta concreta es un sistema de financiación justo y equitativo que respete los criterios establecidos en la Constitución Española en base a la suficiencia y solidaridad territorial. La Comunitat Valenciana presenta indicadores económicos que la sitúan como una de las comunidades autónomas más pobres, a la vez es un de las que peor financiadas están, por ello, se exige una redistribución de recursos entre las comunidades que más tienen y las que menos, así como una mayor proporción en la participación de recursos del Estado.

Pero también es necesario subsanar la cuestión de la deuda histórica, por vía de una doble actuación: el aumento de inversiones y ejecución concreta de los presupuestos generales del Estado; y la condonación de la deuda generada por los créditos que se han pedido por necesidad debido al déficit producido por el injusto sistema de financiación.

-Cambio climático y transición ecológica son dos conceptos que necesariamente hay que aterrizar de manera urgente. ¿Cuáles son sus principales propuestas?

Somos conscientes de que el modelo productivo actual no contiene elementos de sostenibilidad sólidos que garanticen un mínimo de provisión natural a las generaciones futuras y reduzcan el ritmo de destrucción del planeta. Se requiere de propuestas serias e inmediatas. Por ello, planteamos un modelo económico verde y descarbonizado, con la principal propuesta de una industrialización inteligente, ya que, se requiere de la restructuración del modelo productivo, modelo laboral, protección del comercio y producto local, para tener un ciclo de producción sostenible. Además de inversiones en transición energética y financiación en la investigación de alta tecnología y energías renovables.

Pero no descuidamos la necesidad de responder a los impactos actuales, y respecto a la calidad del agua, tenemos propuestas para fomentar el precio justo del agua desalada y aumentar mediante investigación y tecnología su calidad. En cuanto a contaminación, contamos con propuestas dirigidas a mejorar la salud de los valencianos, como el Plan de Calidad del aire basado en mediciones atmosféricas y que incluye controles exhaustivos en zonas metropolitanas, entre otras propuestas.

-Respecto a agricultura, ¿cómo frenar la entrada de cítricos sudafricanos?

Este problema emana de las decisiones que se toman sin tener ninguna cláusula normativa que proteja el producto local, por ello, exigimos que ante las decisiones nacionales y comunitarias, debe haber prioridad e interés en proteger nuestros productos frente a las importaciones de países terceros.

«Debe haber prioridad e interés en proteger nuestros productos frente a las importaciones de países terceros»

Motivo por el cual, deben de exigirse estudios previos a la firma de cualquier acuerdo o tratado de libre comercio, especialmente centrados en los posibles impactos sociales, laborales y sobre la producción agraria valenciana. En esta misma línea, a los acuerdos todavía vigentes se les exigirá la aplicación de cláusulas de salvaguarda cuando se demuestre que han perjudicado a la producción local, como es el caso de los cítricos valencianos.

-¿Cuál sería la primera medida que tomaríais en cuánto a la gestión de residuos?

-Para nosotros lo principal es la aprobación de la Proposición de Ley de Prevención de Residuos y Fomento de la Economía Circular por la que hemos peleado esta legislatura. Esta ley contiene varias medidas esenciales como la creación de la Agencia de Residuos, los impuestos al vertido y a la incineración, o encontrar una fórmula para asegurarnos el cumplimiento de los objetivos que nos marcan desde Europa en materia de reciclaje, en particular de los envases.

-La fragmentación de la escena política es evidente y harán falta acuerdos para formar un nuevo gobierno en la Comunitat, de repetirse el mismo escenario que hace cuatro años, ¿mantendríais el apoyo a un gobierno del PSPV y Compromís?

-El ejercicio de transición política, ya pasó con la primera etapa del Botànic. La próxima legislatura ya tiene un modelo de ejecutivo de coalición asentado, queremos tener un papel central en la transformación de la vida de la gente.

Rubén Martínez Dalmau.

La implementación de políticas públicas tiene su papel más activo en el ejecutivo, por lo tanto, formaremos parte del Consell y trabajaremos de forma directa para mejorar la vida de las valencianas y los valencianos. No nos planteamos otro escenario, hemos demostrado nuestro compromiso con el cambio con nuestro apoyo en 2015, pero somos a nivel estatal, autonómico y municipal el principal agente del cambio y de regeneración democrática. No vamos a dar un paso atrás.

-¿Qué ha permitido que Vox entre en escena? ¿Os preocupa?

El discurso del odio visceral contra la mujer, la inmigración, hacia el colectivo LTGBI, poner las banderas por delante de las cosas de comer, buscar el enfrentamiento ante la incertidumbre social…, son fórmulas viejas y repetidas que cuestionan el Estado de Derecho. Hay multiplicidad de factores que inciden en la propagación de un pensamiento ultraconservador, nostálgico de tiempos autoritarios que ya no representan a la ciudadanía valenciana.

«Lo más preocupante es que partidos que se denominan a sí mismos constitucionalistas, se han repartido sillones con una fuerza reaccionaria»

Es cierto, que hay riesgo de que ocurrencias como las denuncias falsas por maltrato machista, derogación de la Ley de Violencia de Género, eliminación del acceso a la sanidad para inmigrantes…, puedan captar a quienes no encuentran una respuesta certera en un momento difícil, pero el votante de Vox tiene un perfil mayoritario que es conservador. El trasvase de voto principal proviene del PP y Ciudadanos. Es la factura a pagar cuando se juega a ver quién es más reaccionario.

Lo más preocupante es que partidos que se denominan a sí mismos constitucionalistas, se han repartido sillones con una fuerza reaccionaria que plantea la supresión de las autonomías y recordemos que este país no puede explicarse sin el desarrollo del Estado Autonómico. Esto significa que si muchas personas se quedan en casa el 28-A, puede repetirse la misma situación en la Comunitat Valenciana, porque el voto conservador no tiende a desmovilizarse, pese a lo que digan las encuestas.

-Ya por último, ¿por qué deberían los valencianos votar a Podem?

Porque el voto a Podem tiene una deuda social ante la que responde y no una deuda bancaria ante la que obedece, como sí otros partidos. El voto a Podem, es la decisión que garantiza a los valencianos un gobierno social y de progreso en España, además de un gobierno valenciano que complete el cambio del Botànic. Es un dos por uno que visibiliza y posiciona mejor a la Comunitat Valenciana.

Existen otras fuerzas progresistas que contribuyen a la regeneración democrática y al cambio, pero en estas elecciones nos jugamos demasiado, las valencianos y valencianos necesitamos ir más allá, porque el Botànic debe avanzar con una fuerza impulsora del cambio y Sánchez necesita en frente una fuerza con suficiente apoyo social para obligarle a no ceder ante su clara preferencia por el programa económico de Ciudadanos, como así evidenció José Luis Ábalos.

La voz de la ciudadanía valenciana debe escucharse con intensidad aquí y en Madrid. Podem es el impulso, es el voto sin deuda bancaria, sin amos que les exijan contraprestación y que pretendan escribir la historia a costa de la ciudadanía, porque con Podem y Podemos, la historia la escribes tú.