Su materialización se ha realizado en el seno del pleno del Consell con una novación al contrato suscrito en 2016 entre la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunitat Valenciana (SPTCV) y Volvo Ocean Race para la celebración de las dos próximas ediciones de esta regata. La portavoz del Consell, Mónica Oltra, ha explicado que la competición pasa a ser cuatrienal en lugar de trienal, que la Generalitat dejará de ser avalista del evento y la SPTCV queda exonerada de sufragar un barco y su tripulación, y que el canon baja de 9 a 7 millones y se condiciona al retorno que se obtenga.

La sustitución de la posición contractual de Volvo Ocean Race SLU por Atlant Ocean Racing Spain SLU va a conllevar, asimismo, el cambio de denominación de la regata, que ahora pasa a llamarse «The Ocean Race«.

Las nuevas condiciones de este contrato modifican las fechas inicialmente previstas para la celebración de las dos próximas ediciones de esta regata, al pasar a tener carácter cuatrienal, de forma que la decimocuarta edición, que se iba a celebrar en 2020-2021, será en 2021-2022, y la decimoquinta, prevista para 2023-2024, se pospone a 2025-2026. Asimismo, se ha modificado el calendario de pagos previsto en el contrato suscrito entre la SPTCV y Volvo Ocean Race en 2016, que se adaptará a las nuevas fechas de la regata.

SPTCV toma el control en nombre del Consell

Volvo Ocean Race solicitó una novación del contrato firmado en junio de 2016 para las ediciones 14 y 15 de la regata, tras haber vendido en 2018 los derechos del evento a Atlant Ocean Racing Spain SLU. La modificación del contrato, que garantiza la continuidad de la prueba desde Alicante tras la venta de esos derechos, incorpora novedades como que el riesgo asumido por la Generalitat por la celebración de este evento en la ciudad de Alicante se reducirá de los actuales 22 millones a 9,5 millones de euros por edición.

Esta importante minoración es fruto, principalmente, de la eliminación del compromiso por parte de la SPTCV de contar en todas las ediciones de la regata con una embarcación española, que suponía un gasto de hasta 12,5 millones de euros por edición si los patrocinios no cubrían los gastos.

Respecto al canon que debe abonar la Sociedad pública, aunque se mantiene en 6,5 millones para la decimocuarta edición y se incrementa a 7 millones en la decimoquinta, no se actualizará de acuerdo al IPC y queda condicionado al impacto o retorno obtenido del evento, de forma que si no se alcanza un umbral mínimo de retorno, no se abonará.

Otra novedad es que la Generalitat deja de figurar como avalista del evento y que el aval, asumido ahora en su totalidad por la Sociedad Proyectos Temáticos de la Comunitat Valenciana, se reduce de 9 millones a 7 millones. En la edición de 2014 era de 10 millones de euros.