El Consell de Govern de la Universitat de València (UV) ha aprobado este martes el proyecto de presupuesto de la institución para 2019, que se sitúa en 372 millones de euros. El documento ha sido presentado por el gerente, Juan Vicente Climent, y ahora tendrá que ser aprobado por el Consell Social. Representa un incremento del 5,95% respecto al vigente de 2018. Uno de los aspectos destacados es la reducción en un 23,91% de los gastos financieros previstos, y un aumento de un 16,14% en las inversiones reales.

Los ingresos por las tasas que paga el estudiantado se reducirán en un 8%, tal como ha aprobado el Consell de la Generalitat. La subvención ordinaria de la Generalitat se sitúa en los 233 millones de euros. Además, el Consell autonómico realizará aportaciones adicionales para diferentes finalidades: desde compensar la reducción de los ingresos por tasas a la consolidación de la carrera profesional del personal de administración y servicios. También por la aplicación del convenio de amortización de la deuda histórica.

El gerente ha recordado que la UV continúa estando infrafinanciada, y ha pedido un nuevo plan de financiación de las universidades públicas valencianas.

Protocolo acoso por razón de sexo

En su informe, la rectora, Mavi Mestre, ha informado, entre otros puntos, de las protestas de estudiantes de la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación por un posible caso de acoso por razón de sexo. La rectora ha expresado el apoyo a las gestiones realizadas en todo momento por la decana del centro. También el resto de decanos y decanas han expresado el apoyo a la decana de Filosofía y Ciencias de la Educación.

La rectora ha indicado que “en la proximidad de estas fechas se produjo un conjunto de comunicados, cierre en una facultad y actos de protesta en diferentes campus denunciando públicamente el comportamiento de un profesor de la Universitat que tuvieron una importante repercusión mediática de ámbito estatal. Después de las reuniones mantenidas con las estudiantes se activó el protocolo contra el acoso».

A raíz de la activación de las denuncias, una comisión universitaria está investigando el caso, asegurando la confidencialidad y el anonimato, tanto de las estudiantes denunciantes, como del profesor implicado.