Tampoco ha gustado en el Ayuntamiento de Valencia el proyecto de Presupuestos Generales del Estado 2018. El consistorio considera un menosprecio que no se contemplen las ayudas al transporte metropolitano, tal y como ocurre en otras ciudades.

El alcalde Joan Ribó ha declarado que los valencianos no se merecen este trato. “Éstos son los presupuestos de la desvergüenza de Rajoy con los valencianos”. El alcalde ha instado a PP y Ciudadanos “a pensar dos veces su apoyo a estos presupuestos totalmente antivalencianos: habría que defender su mejora absoluta en la fase de enmiendas y, si no es así, un contundente voto en contra. València no puede soportar este maltrato”.

Ribó hizo un repaso a la falta de inversiones en puerto y aeropuerto, así como al soterramiento de las vías o la estación definitiva del AVE y el túnel pasante, además a la ausencia de cualquier ayuda al transporte metropolitano. Ribó ha acabado afirmando que el presidente del Gobierno “pone palos a las ruedas del desarrollo económico de València». 

El alcalde recordó que, por el contrario, los PGE18 prevén una inversión de  460 millones para el eje ferroviario atlántico; 427 millones para la Y griega vasca, o «los casi 184 millones que se invertirán en la operación Chamartín”.

Tanto el concejal de Hacienda, Ramón Vilar, como el de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, han criticado la falta de ayudas estatales para el transporte público que, una carencia que supondrá un grave perjuicio a las arcas municipales. En opinión de Vilar, la aportación estatal debería ser superior a los 60 millones de euros.

Vilar ha recordado que los presupuestos han obviado la constitución de la Agencia Metropolitana de Transporte, a cuya existencia el Gobierno vinculaba las ayudas. El concejal de Hacienda ha manifestado que “el Gobierno Central se ha quedado sin excusa al haberse constituido la Agencia Metropolitana del Transporte, a cuya existencia vinculaba desde hace más de 10 años la firma del citado contrato-programa”, mientras que ciudadanos de Madrid, Barcelona o Canarias reciben «sustanciosas aportaciones».

En concreto Madrid recibirá 127 millones de euros; Barcelona 110 millones y Canarias 47’5. Ribó, por su parte, señaló que a estas cifras hay que añadir los 6 millones y medio que recibirá el metro de Sevilla, y el de Málaga otros 5 millones y medio.

Vilar recordó que el pasado ejercicio el presupuesto para la EMT fue de 62 millones de euros, y que es difícil de aumentar.  «Montoro -agregó- no solo castiga la financiación municipal al no abordar la necesaria reforma del modelo de financiación local, sino que se ceba especialmente en esta ciudad y sus habitantes”.

Ramón Vilar recordó que ya en 2013 el gobierno local del Partido Popular ya cifraba en 55 millones la aportación que el contrato-programa debería de aportar el transporte metropolitano de València. “Una actualización en términos muy contenidos hace necesario que para 2018 la aportación fuera superior a los 60 millones de euros, de los cuales al menos 40 se consideran absolutamente inaplazables”

Por su parte, Grezzi ha asegurado que se trata de «una marginación planificada y ejecutada sin atender a ningún criterio«. La falta de las ayudas supondrá que no se renovará la flota, «mientras Madrid cambiará cada cuatro años sus autobuses», agregó el concejal. También criticó que no se haya previsto ninguna partida para el soterramiento de las vías ni para retomar las obras de la T2.

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