Millones de personas en todo el mundo beben agua contaminada. Más del 80% del agua residual que se genera vuelve a los ecosistemas sin ser tratada ni depurada. Según datos de Naciones Unidas, más de 700 millones de personas viven sin acceso a agua potable y más de mil niños mueren al día por beber agua contaminada.

1.800 millones de personas usan aguas contaminadas por restos fecales, con riesgo de contraer cólera, disentería, tifus o polio. El agua no potable, la inexistencia de infraestructuras sanitarias y la falta de higiene causan al año 840.000 muertes.

Para combatir esta realidad, Auara, con la colaboración de BBVA y la Universidad San Pablo CEU, impulsa una campaña de sensibilización coincidiendo con el Día Mundial del Agua para concienciar del grave problema que supone la escasez de agua potable.

La iniciativa se centra en explorar cómo la naturaleza -siguiendo el propio lema de la ONU, la respuesta está en la naturaleza- puede ayudar a superar los retos que el agua plantea en esta centuria. Consiste en grabar con cámara oculta la reacción que provoca en el primer mundo encontrarse en las máquinas de vending de los centros de trabajo o educativos agua sucia.

Antonio Espinosa de los Monteros, fundador de Auara, recuerda que el agua centra el objetivo 6 de desarrollo sostenible de la ONU: garantizar la disponibilidad de agua, su gestión sostenible y saneamiento para todos. Espinosa señala que “el agua es un elemento clave en la reducción de la pobreza, el crecimiento económico y la sostenibilidad ambiental”.

Auara invierte el 100% de los dividendos que genera con sus ventas en desarrollar proyectos de acceso a agua potable en países en vía de desarrollo. Es la primera empresa social española certificada por Social Enterprise Mark. Desde su lanzamiento en septiembre de 2016 ha dado acceso a agua a más de 11.000 personas.