Dos compañeros con una gran inquietud empresarial y con experiencia en el sector mobiliario aunaron fuerzas allá por 2005. Al mismo tiempo, una modesta planta baja en una céntrica calle del municipio valenciano de la Pobla de Vallbona buscaba nueva actividad. Salvador Pitarch y Aure Bascuñana supieron detectar la gran oportunidad de negocio que les brindaba el tejido empresarial valenciano y apostaron por el asesoramiento mobiliario para oficinas, enfocado totalmente al servicio. Tras trece años de buenos resultados, Oficines, actualmente ubicada en Paterna, es hoy un empresa modelo en la provincia de València.

Oficines, como distribuidor, trabaja codo con codo con tres grandes fabricantes. Actiu, originario de Castalla (Alicante), es su principal proveedor. Aure asegura que “Oficines y Actiu han crecido de la mano”. Ofifran, especializado en el diseño y la fabricación de muebles de oficina modernos, es su segundo proveedor más importante, también valenciano. Sitab es el tercer compañero de viaje de Oficines. En este caso, se trata de una empresa vasca, especializada en mamparas y tabiquería. “El fabricante con el que trabajamos es parte de nuestro éxito”, reconoce Aure.

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El 90 % de los servicios que ofrece Oficines se concentran en la provincia de València. “Salimos de la Comunitat para prestar nuestros servicios en el resto de España, únicamente, si lo solicitan nuestros clientes”, explica Salvador.

Con una plantilla de catorce trabajadores, Oficines ha pasado de facturar 500.000 euros el primer ejercicio a 2,2 millones el pasado año. “El crecimiento ha sido progresivo y este año nos hemos establecido unos objetivos que rondan los dos millones”, apunta Aure.

El trabajo de comerciales, técnicos, administrativos y especialistas en montaje de mobiliario se traduce en una clientela satisfecha que supera los 1.000 usuarios. “En el transcurso de nuestra historia creo que tenemos un único cliente insatisfecho de verdad y los dos sabemos quién es”, comentan ambos empresarios con miradas cómplices. “El cliente –añade Aure– es quien marca las directrices y, a partir de ahí, enfocamos todo nuestro potencial para darle el servicio”. Los dos coinciden en que “el proyecto construido para Tignus fue la primera gota importante y la actual reforma integral de Das Audio ha marcado un antes y un después”. 

Han trabajado para entidades dentro del sector alimentario, como Cinco Tenedores y Elaborados Cárnicos Medina; para empresas dentro del sector automovilístico, como IT8, Doctor Franz Schneider y Ford; para bufetes de abogados, como Tomarial; para consultoras internacionales, como Alberta Norweg; y para la administradora y gestora del Polígono Fuente del Jarro Asivalco, entre otras. Oficines está posicionada entre los tres negocios más importantes de la Comunitat en su sector. “Intentamos estar presentes entre las empresas del sector que pujan por el equipamiento de las mejores entidades del tejido empresarial valenciano”, afirma orgulloso Aure. “No es fácil -reconoce Salvador-, pero luchamos por estar entre las mejores y eso se consigue trabajando. Pase lo que pase, hay que armarse de valor y dar lo mejor de cada uno. Regalar, no regala nadie nada”. 

La tecnología es un elemento clave, tanto a nivel técnico, como en la presentación y comercialización de sus servicios. “Diseñamos en 3D y usamos la tecnología para argumentar a nuestros clientes lo que les vamos a hacer”, aclara Aure. Por otra parte, también han sabido adaptar el mobiliario y su proyección en el espacio para dar respuesta a las nuevas necesidades de las oficinas 3.0. En Oficines tienen muy claro que hoy en día los enchufes tienen que ser accesibles y que es necesario reservar un espacio adecuado para pantallas y otros dispositivos requeridos para el desarrollo de las actividades diarias de sus clientes.

“Una tienda de muebles tiene los días contados”, así de contundente se muestra Aure cuando le preguntamos a cerca del futuro de Oficines. “Nuestro nicho de mercado –detalla– es transformarnos en una empresa de servicios para empresarios que no pueden perder mucho tiempo en cambiar la oficina, pero tampoco en asesoramiento y temas burocráticos derivados de la reforma. Si nos piden que decoremos la oficina y les contestamos que solo vendemos muebles nos estamos limitando”.

Oficines busca convertirse en una empresa capaz de prestar un servicio completo desde el minuto cero hasta la entrega final de llaves de la oficina remodelada, crear proyectos propios e, incluso, desarrollar los que han sido diseñados por terceros son algunos de sus objetivos a corto plazo. “En un futuro un poco incierto, estamos diseñando cómo nos vamos a situar y a qué nivel vamos a llegar”, aseguran desde Oficines. Aunque no quieren entrar en detalles ni adelantar acontecimientos, ambos empresarios aseguran que están moviendo proyectos “muy gordos”, con algunas concesiones conseguidas y otras a punto en las últimas rondas de negociación.

Oficines también está en contacto con diseñadores y técnicos externos con quienes comparten conocimiento y crean sinergias empresariales. “Apoyamos a diseñadores y decoradores que tienen proyectos propios, pero necesitan nuestras infraestructuras logísticas. Y, al revés, puede ser que el cliente contacte con nosotros y demande un proyecto de decoración. Para ello, contratamos servicios puntuales que nos permitan responder a necesidades especiales. El guión lo marca el cliente”, comentan sin complejos.

En su sede de Paterna, en la sala de entrada dedicada a la recepción de clientes, también atienden pequeñas compras individuales. “Una de nuestras virtudes es que somos capaces de adaptarnos a cualquier necesidad del cliente, tanto a nivel presupuestario como de servicios”, afirman con humildad. “Atendemos con la misma predisposición a un cliente que viene a buscar una silla que a una empresa que nos está solicitando un presupuesto para un gran proyecto”, concluyen con sinceridad. 

Tanto Salvador como Aure entienden que la clave del éxito empresarial pasa por ser un equipo. “Una empresa es como un equipo de fútbol: uno se encarga de marcar, otro cubre la portería para que no marque la competencia, hay quien tiene que defender y quien remata. Son un montón de acciones que todas juntas suman”, explican. Son conscientes de que, como máximos responsables de una empresa, es necesario delegar y apoyar parte de la gestión en el resto de trabajadores. La confianza es fundamental. “Cada día intentamos transmitir y concienciar a nuestra plantilla de que el triunfo es colectivo y necesitamos trabajar todos a una”, comenta Salvador.

Admiten satisfechos­­ ser una empresa bastante flexible con los horarios de sus trabajadores porque entienden la dificultad de conciliar la vida familiar y laboral.