Uno de cada cinco inmuebles comprados en España por extranjeros ha sido vendido en Alicante, la primera provincia en esta clasificación por delante de Málaga, Madrid y Barcelona.

Son datos difundidos hoy en el informe de coyuntura socioeconómica de la provincia del primer trimestre del año difundido hoy por el Instituto de Estudios Económicos de Alicante (Ineca). Las casas vendidas a extranjeros durante el último trimestre de 2015 en Alicante se elevaron a 3.910 por valor de 517 millones de euros, cantidad ésta última que supone un incremento en el último año del 21,59%

El estudio señala que el precio medio de un inmueble se cifra en 120.260 euros (un 4,14% más que hace un año) y es un 16,44 por ciento inferior a la media española. El mercado de la construcción e inmobiliario es, junto al turismo, uno de los principales motores de la economía alicantina, y el presidente de Ineca, Perfecto Palacio, ha pedido que las instituciones lo apoyen “evitando debates estériles”.

Palacio, que se ha manifestado contrario al establecimiento de cualquier tipo de tasa turística, ha ofrecido otros datos que reflejan algunos signos «preocupantes» y que reflejan un frenazo en la recuperación económica. Entre otros, la recaudación por IRPF, que supone sólo el 1,33 % del conjunto español, lo que lleva a Alicante al puesto 13, mientras en impuestos como el IVA o el de sociedades, la provincia ocupa lugares más altos. Según Ineca, muchas empresas han trasladado sus centros de decisión a otras capitales, como Madrid, algo que puede haber potenciado la conexión mediante el AVE, causando una “fuga de directivos”, mientras  quedan en la provincia las plantas de producción.

Este efecto incide además en una media salarial muy inferior a la media. Según Ineca, los sueldos en Alicante son entre un 25 y 30 por ciento más bajos que en otras zonas del país, lo que contribuye a que la pensión media sea de 781 euros al mes por los 900 de la media española, por lo que los pensionistas alicantinos “perciben dos pagas menos que el resto de los mayores de España”.

En la balanza negativa del informe se sitúa también el saldo comercial, puesto que las exportaciones han crecido sólo el 4,4 por ciento (por un 8,8% en Valencia y más del 10% en Castellón), mientras las importaciones se han disparado, con un saldo comercial de 51 millones tras 4 meses consecutivos de reducción.