Desde la patronal autonómica Cierval prefieren hablar de empresarios, más que de emprendedores, “porque no olvidemos que se trata de poner en marcha una idea que pueda generar riqueza, desarrollo económico y empleo, y son las empresas y los empresarios los que lo hacen, bien sean los ya existentes, bien los que aún están en embrión”, evidencia Javier López Mora, secretario general de Cierval.

En su opinión, además de necesitar un marco regulatorio que permita crear las condiciones necesarias para promover la actividad empresarial como medio para salir de la crisis, es necesario dar nuevos pasos en la reactivación del crédito: “Tenemos tremendas dificultades para acceder a un mercado financiero cada vez más angosto y considero que, el grandísimo esfuerzo que ha hecho la sociedad española por salvaguardar un sistema bancario, moderno y saneado, debería verse recompensado con una apuesta real por las buenas ideas, por apoyar aquellos proyectos empresariales con recorrido y a aquellas empresas que, están consolidadas y mantienen empleo, pero que en estos momentos lo están pasando especialmente mal por la falta de crédito”, reflexiona López Mora.

El representante de la patronal reconoce además un handicap añadido para las empresas ya existentes, porque “mientras los proyectos de emprendimiento pueden estar recibiendo algún tipo de ayuda o impulso por parte de la Administración, son muchos los proyectos empresariales que podrían haber sido viables y que han tenido que ser aparcados por falta de financiación”. “Somos conscientes de la voluntad de las Administraciones por atender sus compromisos, pero han de velar por la supervivencia de aquellas empresas que están haciendo un esfuerzo por mantener la plantilla, y muchas veces se ven abocadas a reducir sus estructuras”, añade.

También desde ATA, su presidente Rafael Pardo aboga por medidas más concretas que supongan “la apertura del grifo del crédito”. “Es necesario que nos podamos financiar, porque en este momento hablar de crecimiento sin financiación, es pura ciencia ficción”, asegura Pardo. A su juicio a la dificultad de conseguir la financiación, se une una segunda problemática, “a pesar de que el Euribor está en sus mínimos históricos, hay que pagar a cambio unos intereses y comisiones desproporcionadas, lo que provoca que, en muchos casos, vayamos “ahogados” para devolver el préstamo, a la vez que intentamos consolidar el proyecto empresarial”, concreta el representante de los autónomos.